RTVE pudo reducir a la mitad los acreditados a Río de Janeiro

| 13 JULIO 2016 | ACTUALIZADO: 13 JULIO 2016 11:39

RTVE ha presentado su cobertura para los próximos Juegos Olímpicos. La corporación pública desplazará a Río de Janeiro un total de 129 personas, además de los tres miembros de la corresponsalía de la zona y de los comentaristas técnicos que se irán sumando a la cita para apoyar las retransmisiones de las distintas disciplinas deportivas. De esta cifra, seis profesionales viajarán de vuelta a España una vez realizado el despliegue técnico.

El dispositivo diseñado por la dirección de RTVE para la cita olímpica incluye un total 273 profesionales de la casa, de los cuales 141 se encargarán de cubrir la información desde España, ya sea en Torrespaña o en el centro territorial de Sant Cugat del Vallés, en Barcelona.

Aunque la cifra de las 129 personas que viajarán a Río de Janeiro es muy similar a la que se enviaron en los Juegos de Londres, donde se desplazaron 123 profesionales, fuentes procedentes de la corporación explican a DIRCOMFIDENCIAL que el dispositivo para este evento podría haberse reducido considerablemente.

El medio público sopesó la idea de reducir la presencia en la cita olímpica implicando a un equipo de 76 personas, la mitad de los que viajarán finalmente

Para ser más exactos, hace dos años la dirección del medio público valoró la posibilidad de limitar su presencia en la cita deportiva de este verano en Brasil implicando a un equipo de 76 personas en la retransmisión de las pruebas deportivas. Es decir, la mitad de la cuenta que viajarán finalmente según anunció este martes el director de TVE, Eladio Jareño.

En un primer momento los encargados de diseñar la estrategia informativa de los Juegos de Río en TVE contemplaron rebajar por debajo de la centena el número de profesionales desplazados y reforzar la cobertura desde España. La labor de los encargados de informar desde la sede olímpica sería apoyada con la recepción de señal y la realización de los estudios de Madrid y Barcelona.

Parte de la directiva de RTVE vio con buenos ojos organizar un operativo más moderado de cara a la cita de Río de Janeiro, mucho más que el desplegado en Londres 2012 pero también en Pekín 2008, donde acudió un dispositivo de 208 trabajadores. A este respecto, conviene recordar que en aquellos años el presupuesto de la corporación era superior al actual y que, concretamente en la cita de la capital china, mantenía la publicidad como fuente de financiación.

Sin embargo, la proposición no llegó a prosperar por presiones del Sindicato Independiente de Comunicación y Difusión (SI), que tiene una gran representación en la estructura de RTVE. El sindicato se opuso de manera rotunda a la idea de adelgazar la comitiva de RTVE en Río 2016 y tumbó este plan de ahorro, según cuentan estas fuentes.

Un presupuesto mayor al de Londres

El objetivo de esta propuesta no era otro que reducir los costes derivados de la cobertura olímpica, que representa una de las mayores inversiones presupuestarias en RTVE. Sin ir más lejos, prevé destinar 4,5 millones de euros para Río 2016, una cifra «muy ajustada» según Eladio Jareño y muy próxima a la invertida en Londres 2012, que fue de 3,5 millones. A esta cifra hay que sumar los 50 millones de euros que invierte la corporación en la compra de los derechos deportivos y que proceden de la partida extraordinaria aprobada por Hacienda en los Presupuestos Generales del Estado de este año.

Ahora bien, pese a que el director de la cadena pública aseguró que el desembolso total de 54,5 millones euros previstos para esta edición olímpica es inferior al de los 70 millones alcanzados en Londres, la inversión debe evaluarse por ciclos olímpicos, esto es, comprendiendo los Juegos Olímpicos de verano y de invierno. En este sentido, RTVE pagó 70 millones por hacerse con los derechos de Río 2016 y Sochi 2014, una cantidad superior a la del ‘paquete’ de las ediciones de Londres 2012 y Vancouver 2010.

Curiosamente, la firma del contrato por los derechos de Río y Sochi se cerró en 2009 para no interferir en las posibilidades de Madrid, que entonces se postulaba como ciudad candidata a organizar los Juegos Olímpicos de 2016.