The Guardian recorta un 20% su presupuesto ante el escaso crecimiento de la publicidad digital
Guardian News & Media, la empresa editora de medios como The Guardian y The Observer, ha planteado un recorte del gasto de un 20%, lo que se traduce en un ahorro del alrededor de 65 millones y medio de euros (50 millones de libras).
Las razones del cambio de política se basan en tres aspectos concretos: el primero es el continuo descenso de la publicidad en el diario de papel que, unido al escaso crecimiento de los ingresos por publicidad digital, provocan una pérdida sistemática de ingresos. Si a esta situación se le añade la gran inversión realizada por la editora tras la expansión al mercado estadounidense y australiano; el resultado es un crecimiento de gastos muy alto que no ha podido ser equilibrado con más ingresos.
La junta directiva de la editora ha presentado unos costes operativos de más de 352 millones de euros, lo que se traduce en un aumento del 23% en los últimos cinco años, mientras que los ingresos solamente se han incrementado un 10% durante ese periodo.
Las previsiones de crecimiento de la publicidad del grupo no han alcanzado las expectativas, en especial la de la prensa de papel, que ha descendido en 2015 cerca de un 25%. Esta fuerte caída no ha podido ser compensada con los ingresos por publicidad digital, que mantienen un tendencia positiva pero no llegan al nivel de las caídas de la publicidad en papel.
El aumento de la contratación provocado por la expansión internacional ha hecho que la plantilla alcance los 1.960 trabajadores a tiempo completo. Un tercio de los nuevos contratos han sido firmados en los Estados Unidos y Australia, donde la apuesta está siendo muy fuerte.
El nuevo modelo de negocio
Vista la situación del grupo, tanto desde una perspectiva económica como de mercado, Katharine Viner, editora jefe del grupo; y David Pemsel, director ejecutivo; presentaron a la Junta el denominado “Proyecto 2021”, en el que se centrará la compañía en los próximos años. Como premisa principal está el mantener el equilibrio financiero con vistas a crear las bases de un futuro crecimiento.
Además de la base económica el diario ha pensado implantar un nuevo modelo de negocio basado en la en la oferta de un paquete Premium. Según ha explicado Pemsel no es un muro de pago, “no queremos limitar nuestra capacidad de comunicar a un gran público. Pero hemos situado la idea del lector Premium en el centro de nuestro trabajo, el corazón del medio”.
Con la aplicación de esta nueva política el grupo espera doblar los ingresos por lector: se barajan cifras que pasarán de los 39 a los 80 millones de euros. La idea es que aquellos lectores que se unan al modelo de suscripción podrán disfrutar de contenidos específicos para ellos, mientras el medio mantiene el resto de contenidos disponibles para los demás de usuarios.
