The Guardian tiene 821.000 lectores donando de forma regular, un 23% más que el año pasado
La cobertura del coronavirus está causando dos efectos contradictorios para los medios: por un lado, el desplome de los ingresos publicitarios por el bloqueo por parte de los anunciantes; por otro, el aumento significativo del apoyo de los lectores en forma de suscripciones o donaciones. Este último es el caso de The Guardian, que al final de marzo contabilizaba 821.000 lectores que hacen aportaciones recurrentes, lo que supone un 23% más respecto al año anterior.
Casi la mitad de esos donantes estables leen el periódico desde fuera de Reino Unido, en parte como consecuencia de los esfuerzos de The Guardian por incrementar el alcance de sus ediciones en Australia y EEUU. Y la base de lectores también ha aumentado a lo largo de toda Europa.
Si se incluyen las contribuciones realizadas una sola vez, la cifra de personas que ha colaborado económicamente a lo largo del último año fiscal de The Guardian asciende a unos 1.160 millones. Y a ellos se suman los compradores habituales de la edición impresa, tanto al número como en suscripciones.
A mediados de marzo The Guardian había explicado en este artículo cómo está afrontando la cobertura del coronavirus y sus consecuencias. Ahí adelantaba que su pieza explicativa sobre la enfermedad era ya la más leída de la historia del periódico y que desde el registro de la primera muerte en China había dedicado recursos a lo que luego se convertiría en pandemia.
Este trabajo ha sido reconocido como el mejor de todos los medios digitales e impresos de Reino Unido por un estudio del Instituto Reuters. Y se ha visto recompensado por un pico histórico de tráfico que le llevó a casi duplicar su número de usuarios únicos en marzo respecto al dato del año pasado, hasta 366 millones, con un 70% de las páginas vistas generadas por contenido acerca del coronavirus.
Este repunte fue desvelado a los trabajadores durante una reunión y supone que el diario alcanza su sostenibilidad financiera por segundo año consecutivo. Los datos serán publicados en julio, y para entonces además habrá una imagen más clara del impacto de la crisis de ingresos publicitarios derivada del coronavirus, tanto en The Guardian como en el resto del sector.
