CLABE: la AEEPP se refunda en un momento vital para el sector

| 15 DICIEMBRE 2020 | ACTUALIZADO: 16 DICIEMBRE 2020 10:34

Club Abierto de Editores. O dicho de manera abreviada, CLABE. Es la nueva identidad que adopta la Asociación Española de Editoriales de Publicaciones Periódicas (AEPP) de cara a una era que se abre coincidiendo con su XX aniversario.

La primera asociación del sector de medios de comunicación en España, con 158 grupos empresariales asociados y cerca de 800 cabeceras de todos los formatos, aborda su refundación en un momento crucial para la industrial.

«Estamos en una nueva etapa de cambio de nombre, de imagen y de gestión, queremos tener una posición de liderazgo en la recuperación del sector de medios, junto a otras asociaciones con la que hemos aunado fuerzas en una plataforma de editores», manifiesta su presidente, Arsenio Escolar.

El concepto de club surge con la intención de convertir la organización en un espacio de encuentro común para todos los actores del sector. «Cada día son más frecuentes proyectos conjuntos entre algunos editores que en teoría parecían competidores», ha señalado Escolar en relación a la evolución de la profesión durante el evento de presentación.

Asimismo, CLABE apela al carácter esencial del sector, «uno de los pocos que están en la Constitución», para que sean atendidas algunas de las reclamaciones planteadas a las administraciones en el inicio de la pandemia. «Llevamos al Gobierno central un plan de choque con 25 medidas estratégicas para afrontar la crisis de la prensa. Algunas se han hecho, como el IVA digital, pero muchas otras aún no», remarca Escolar.

Entre las iniciativas pendientes de afrontar, la declaración de la prensa dentro un servicio postal universal al desarrollo de planes de formación en digitalización.

Un reivindicación que se produce en un momento de triple crisis: la coyuntural del 2008, «de la que no todos hemos salido todavía», la pandémica y la estructural, entendida como el cambio de modelo digital. Por ello, desde CLABE consideran fundamental que el sector editorial sea una de las prioridades en el plan del fondo de recuperación.

El cambio de identidad corporativa ha sido desarrollado por la agencia Knom siguiendo el hilo conducto de que la marca «tenía que reflejar la heterogeneidad de la asociación, tanto por tipo de contenido como por el enfoque o el tamaño de los socios que le dan forma».