Hearst plantea despedir a un tercio de su plantilla en España
Hearst España pone cifras a su Expediente de Regulación de Empleo (ERE). El grupo editorial ha planteado a los trabajadores su intención de despedir a 97 personas, cifra que equivale al 31,3% de la plantilla. O, lo que es lo mismo, propone prescindir de un tercio de su fuerza laboral.
Según indican desde el comité de empresa, la empresa ha abierto el periodo de consultas para negociar el proceso de despido. A tal fin se ha constituido una mesa de negociación formada por 16 personas, tres pertenecientes a la dirección de la compañía y trece a la RLT (Representación Legal de los Trabajadores).
Cada una de las partes contará con asesores externos. En el caso de Hearst, ha puesto el proceso de despido en manos de la consultora KPMG, mientras que la parte social recibirá apoyo de CCOO. La próxima reunión está convocada para el 8 de junio.
El grupo editorial ha planteado a los trabajadores su intención de despedir a 97 personas, cifra que equivale al 31,3% de la plantilla.
Tal y como publicó Vozpópuli, los planes de la compañía pasan por reducir la fuerza laboral de la filial, así como «el portfolio (cabeceras, títulos, revistas) que no contribuya, que resulte irrentable, no competitivo y/o no estratégico”. Cabe recordar que entre las marcas editadas por Hearst están Elle, Cosmopolitan, Diez Minutos, Harper’s Bazaar, Men’s Health, Supertele, ¡Qué me dices! o Fotogramas. Esta última se enccuentra en proceso de venta desde hace más de un año.
Se trata de un proceso de ajuste motivado por causas económicas, productivas y organizativas, en el que se verán afectados la mayor parte de los departamentos.
«Esta decisión es totalmente injusta y desproporcionada para los trabajadores y seguirá mermando la calidad del primer grupo editorial en España», denuncian desde la parte sindical. «Durante los últimos años, la RLT ha propuesto opciones para favorecer la viabilidad de la compañía. Ya está demostrado, que la solución no pasa solo por perder capital humano».
Señalan en este sentido que durante el último año se han perdido 63 efectivos debido a solicitudes de bajas voluntarias y otros motivos, razón por la que no entienden que la compañía pretenda despedir a cerca de un centenar de trabajadores. Y es que, de cerrarse el ERE con los términos propuestos, la plantilla se vería recortada en un 46 % en tan solo 18 meses.
