Francisco Marhuenda.

La Razón reduce a menos de la mitad sus ingresos por venta de ejemplares tras la crisis del COVID

| 14 FEBRERO 2022 | ACTUALIZADO: 15 FEBRERO 2022 8:36

La crisis del coronavirus ha arrasado los ingresos por venta de ejemplares de los medios impresos, que de momento no son capaces de compensar con las suscripciones digitales.

En el caso de La Razón, antes de comenzar la pandemia ingresaba por la venta de sus periódicos 20 millones de euros, según los datos de 2019. Un año después, esta parte del negocio se ha reducido a menos de la mitad por el efecto directo de la crisis del coronavirus -los kioskos estuvieron cerrados durante semanas- y también por los cambios en los hábitos de consumo de los lectores, situación esta última que se arrastra desde hace tiempo.

En 2020, la venta de ejemplares proporcionó apenas 8,7 millones de euros al diario de Planeta. De hecho, La Razón dejó de compartir su difusión con el mercado al salirse de la OJD ese año debido a sus pobres cifras. Antes de la crisis, esta cabecera difundía unos 46.000 ejemplares diarios de media. En el ámbito digital, La Razón tiene un esquema de suscripción -YouNews-, pero es una parte muy reducida del negocio. De hecho, ni siquiera ha difundido su cifra de suscriptores digitales, como sí hacen otros medios.

Esta situación de caída del negocio también ocurrió en sus competidores, aunque de manera menos acusada. Por ejemplo, los ingresos por venta de ejemplares en Vocento disminuyeron un 9% en el mismo periodo, mientras que en los de Prisa fue del 18%.

Debido al desplome de los ingresos por venta de ejemplares, se ha abierto una gran brecha con la otra fuente de negocio fundamental: la publicidad. La venta de espacios publicitarios proporcionó a La Razón 29,1 millones de euros en 2020. Es más del triple que los ingresos derivados de la venta de periódicos.

En el segmento publicitario, La Razón no sufrió tanto como otros medios de su competencia. Esta línea de negocio apenas descendió un 6% en 2020, frente a la media del mercado, que sufrió un desplome promedio del 30%.

En total, los ingresos de La Razón durante el primer año del coronavirus fueron de 37,9 millones de euros. Es un 26% menos. Es decir, se esfumó un cuarto del negocio del periódico.

Los ingresos publicitarios ya triplican a los derivados de la venta de periódicos en la cabecera del grupo Planeta.

En el capítulo de gastos, la editora del medio pudo recortar en algunas partidas. Por ejemplo en los aprovisionamientos (aquí entra la compra de papel), cuya factura se redujo hasta los 10 millones de euros, comparado con los 19 millones del ejercicio anterior.

También hubo un ligero descenso en los gastos de alquiler de la sede de La Razón. Hay que recordar que ese año el periódico se mudó desde Josefa Valcárcel o José Ignacio Luca de Tena. Con este cambio, el arrendamiento disminuyó desde los 673.000 abonados en 2019 a los 591.000 euros de 2020.

Gracias a esa reducción de costes, La Razón pudo hacer frente al desplome de sus ingresos y arrojó un resultado de explotación positivo de 117.000 euros (frente a los -96.000 euros de 2019). Pero finalmente el resultado neto volvió a ser negativo ese ejercicio (-86.000 euros), aunque fue mejor que en 2019 (-248.000 euros).