Marcas como Disney huyen de Youtube hasta que resuelva sus problemas de seguridad
Nuevo fallo en el algoritmo de recomendación de Youtube. Esta vez con consecuencias muy graves para la plataforma. Importantes marcas como Disney, Nestlé o Epic Games han retirado su publicidad después de descubrir que sus anuncios aparecían junto a contenidos ‘supuestamente’ sexuales.
La voz de alarma la dio el pasado día 18 un youtuber al desvelar en un vídeo cómo pedófilos de todo el mundo se habían servido de este sistema de recomendación para conectarse entre sí y compartir, por medio de comentarios, el momento exacto en el que eran visibles los cuerpos o zonas genitales de menores.
El problema radica en que estos contenidos, publicados sin fin sexual alguno, llegaban a un público que hacía un uso indebido. Y lo hacían principalmente a raíz de que los vídeos fueran recomendados, aunque no tuvieran que ver con menores. Ello mientras Youtube monetizaba estas visitas, que en ocasiones superaban el millón de visualizaciones.
En ciertas ocasiones el algoritmo actuaba deshabilitando la posibilidad de dejar comentarios, pero por lo general fallaba. La plataforma de Google ha tratado de reaccionar ante este problema de seguridad celebrando una conferencia con los representantes de sus principales anunciantes.
A la conclusión de esta llamada, en la que las marcas expresaron sus preocupaciones, representantes de Youtube han emitido un comunicado detallando los esfuerzos realizados hasta la fecha. «Tomamos acciones inmediatas borrando cuentas y canales, denunciando cualquier actividad a las autoridades y desactivando los comentarios en decenas de millones de vídeos que incluyen menores. Hay más por hacer, y continuamos trabajando para mejorar y detectar el abuso cada vez más rápido», recoge el texto.
Entre las supuestas medidas adoptadas por Youtube en las últimas 48 horas se incluye el cierre de más de 400 canales por su historial de comentarios o la deshabilitación completa de comentarios en millones de vídeos que incluyen a menores de edad. Como sea, los anunciantes consideran que además de llegar tarde, estas medidas resultan insuficientes.
Lo cierto es que los problemas con el algoritmo de Youtube vienen de atrás. En concreto a principios de 2017, cuando algunas de las compañías más grandes del mundo suspendieron su gasto publicitario por temor a que sus anuncios se ubicarán en canales que fomentaban el terrorismo.
A pesar de las múltiples medidas adoptadas, a finales de ese mismo año tuvo que hacer frente a un caso parecido relacionado con contenidos de menores. La nueva controversia surgida ahora vuelve a dejar en entredicho su capacidad de salvaguardar la reputación y la seguridad de las marcas con sus propios sistemas.
