Taboola rebaja expectativas de ingresos para 2022 por tercera vez y no cuenta con que el Mundial de Qatar impulse su negocio

| 11 NOVIEMBRE 2022 | ACTUALIZADO: 14 NOVIEMBRE 2022 8:58

El deterioro de la inversión publicitaria en soportes determinados está pasando factura continuada a las previsiones de empresas clave del sector. Eso es lo que está sucediendo con Taboola, que en sus cuentas del tercer trimestre del año incluye una nueva revisión a la baja de lo que espera facturar a lo largo de todo 2022, un 4% menos. Se trata del tercer recorte en esa proyección y se produce a pesar de que en unas semanas comienza el Mundial de Qatar, ya que la compañía considera que en un escenario incierto como el actual no puede prever un impacto positivo de la planificación que movilice el campeonato.

La plataforma de recomendación de contenidos espera que el comercio electrónico llegue a suponer un tercio de sus ingresos y de los que genera para sus medios colaboradores.

Pese a ello, Taboola acolchó mejor de lo esperado internamente el retroceso previsible en sus métricas más relevantes: ingresó 332,5 millones de dólares, casi un 2% por debajo del año anterior, y totalizó un beneficio bruto un 4,6% por debajo, hasta los 102,7 millones. Pero en todo caso la compañía arrojó pérdidas de 26 millones frente a los 17,3 de beneficio de 2021, en gran parte debido a amortización de intangibles y compensación en acciones.

Según su consejero delegado Adam Singolda, Taboola consiguió añadir más medios a su red y tuvo menos bajas en ella respecto a lo proyectado. Entre las nuevas altas está Prensa Ibérica, que a principios de noviembre firmó un acuerdo de exclusividad para los próximos cuatro años y da acceso a la plataforma de recomendación de contenidos a 27 millones de lectores. También firmaron su entrada BuzzFeed y HuffingtonPost, pero a la vez ha anunciado su salida Bloomberg Media en el contexto de su replanteamiento de la venta de publicidad sin programática abierta ni terceros actores.

Las estimaciones de Taboola se basan en que actualmente capta en torno a 1.400 millones de dólares de un mercado que calcula que abarca hasta 64.000. Confía en atraer más presupuestos destinados a la web en abierto gracias a la revalorización de las soluciones contextuales por la futura desaparición de las cookies de terceros, y también por la eventual salida de una parte incierta de la planificación que hoy se queda en espacios cerrados como Facebook, cuya propuesta queda devaluada por el refuerzo de privacidad en iOS.

En ese aspecto la compañía israelí centra sus esperanzas en el comercio electrónico, que considera que contribuirá en hasta un tercio de los ingresos de los medios con los que trabaja y en la misma proporción en sus propias cuentas. El último trimestre del año será una prueba importante para esta apuesta en un escenario macroeconómico difícil y con el reconocimiento de rivales como Facebook o Amazon de que la traslación masiva de compras que se esperaba al soporte online tras la pandemia no se ha producido.