Boomerang TV se ofrece para trabajar con Netflix ante los recortes continuados de las televisiones
El hueso de la crisis económica amargó el caldo del audiovisual televisivo. La caída en la facturación publicitaria de las cadenas tuvo un efecto cascada en la industria. Especialmente en las productoras, que vieron resentirse su actividad muy pronto, ya fuera por la congelación de emisiones o por recortes presupuestarios.
A pesar de que los principales grupos de televisión de España han sido capaces de enderezar la situación mucho antes que los periódicos o las radios, las productoras no han podido recuperar el techo de presupuesto perdido. Más bien, les ha tocado seguir apretándose el cinturón ante las políticas de rentabilidad de las cadenas, que en su afán por reducir gasto han llegado a crear factorías de confianza con las que trabajar a unos costes más bajos todavía.
Este contexto de austeridad prolongada ha favorecido a grupos como Mediaset y Atresmedia, que pese a la ralentización de la publicidad no han dejado de mejorar sus resultados de forma continuada a base de controlar el gasto. De hecho, la dueña de Telecinco declaró un ahorro en costes operativos de 24,72 millones de euros en los primeros meses de este año, y del que una parte importante viene del área de programación.
Por otro lado, el hecho de que las televisiones hayan hecho de esta necesidad una virtud ha llevado a muchas productoras a la asfixia económica, mientras que otras han aprovechado la coyuntura para abrir nuevas líneas de negocio.
Hace años ya abrió la puerta a ofrecer contenidos en Youtube a través de un multicanal
Es el caso de Boomerang TV, una de las productoras con más actividad en nuestro país, que, ante las escasas expectativas de mejor que dibuja el panorama de la televisión convencional, se plantea la posibilidad de realizar encargos para otras plataformas de distribución.
Así lo reconoce el grupo audiovisual en la memoria que adjunta a sus últimas cuentas económicas, correspondientes al ejercicio 2016. El responsable de formatos como La Voz, El Secreto de Puente Viejo, Top Chef o Mar de Plástico espera «un crecimiento moderado, pero recurrente, de las inversiones en programas y series, debido a la necesidad de mejora de la oferta local por parte de los nuevos actores audiovisuales (Movistar+, Netflix, Vodafone, etc)».
Una llamada a la puerta de actores como Netflix, que en los últimos años ha pasado de peón a alfil en la industria audiovisual y, a la vista del tamaño que está adquirido, apunta a disputar el rol de rey.
En este sentido, los responsables de Boomerang TV reconoce que se trata de una posibilidad motivada por los continuos ajustes presupuestarios de los canales tradicionales. No obstante, estos siguen siendo su principal sustento, luego estima que «si como está previsto, estos crecen, también se incrementarán la cantidad y/o calidad de los encargos de producción».
Ya se ofreció a YouTube
En cualquier caso, no es una idea nueva. Boomerang TV ya se planteó en 2013 abrir el negocio al sector online, ofreciendo contenidos en Youtube a través de una red multicanal. «Debido a que el consumo de contenido audiovisual está cambiando y el público demanda una forma más interactiva, directa y bidireccional, pensamos que la puesta en marcha de una Network en YouTube, es el camino acertado para abrir una nueva vía que nos permitirá llegar a un público mucho más amplio», reconoció a El Confidencial su diretor Juanjo Díaz.
Sea como fuere, la productora plantea estas previsiones en un momento realmente boyante para su actividad. Y es que, de acuerdo con las cuentas depositadas ante el Registro Mercantil, en 2016 su volumen de negocio alcanzó los 77,3 millones de euros, lo que representa un crecimiento del 3% con respecto al año anterior.
También aumentó su resultado consolidado, aunque en una medida mucho mayor. En este sentido, Boomerang TV más que duplicó sus beneficios el año pasado, cuando ganó 11,1 millones de euros. Esto es, un 60% más que en 2015.
