Vértice 360 dibuja una hoja de ruta a tres años tras descontar el Covid

| 12 ENERO 2021 | ACTUALIZADO: 13 ENERO 2021 9:03

Vértice 360 afronta el 2021 con el propósito de multiplicar sus principales magnitudes económicas. Pese a haberse visto afectado de lleno por los cierres de las salas de cines y la caída publicitaria, el grupo audiovisual cerró el año pasado con unos ingresos de explotación de 35 millones de euros, lo que supone el triple en comparación con los 10,7 millones facturados en 2019.

Tras finalizar el 2020 con unas ganancias de 3 millones de euros, la compañía prevé cerrar el año en curso mutiplicando por seis su resultado, hasta los 19 millones, según el plan estratégico para inversores remitido ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). De acuerdo con esta hoja de ruta, en 2023 alcanzaría un beneficio neto de 52,7 millones de euros.

De ello dependerá en buena medida la evolución de la situación económica, algo que ya ha empezado a notar y, más concretamente, de sus planes de internacionalización. En 2020 todos los ingresos provinieron de España pero el plan a tres años contempla generar ingresos en 24 países.

En términos de facturación aspira a registrar 100 millones este año (+185%), 132,7 millones en 2022 y 174,6 millones en 2023. Tanto ahora como entonces la gran aportación venga del negocio mediático, es decir, de la publicidad y medios de comunicación digitales y convencionales que edita.

Esta línea de actividad supuso 21 millones el 2020 y los responsables de Vértiec 360 confían en que la recuperación de la actividad publicitaria la hagan escalar por encima de los 70 millones a finales de este año. Dentro de dos generaría más de 105 millones en el escenario deseado.

Tras finalizar el 2020 con unas ganancias de 3 millones de euros, la compañía prevé cerrar el año en curso mutiplicando por seis su resultado, hasta los 19 millones.

Como segunda pata del negocio destacan los contenidos, que aportaron 5,8 millones este año y aspira a que se triplique. Por último, la unidad derivada de la prestación de servicios de telepuertos, transmisiones y difusión de eventos en directo llegó a los 8,1 millones de euros y tiene margen para duplicarse en un periodo de tres años.

A pesar de lo halagüeño de estas previsiones, la productora y distribuidora audiovisual viene de firmar un 2020 complicado. Para empezar, tuvo que hacer frente a las presiones de los bajistas en bolsa durante hasta mediados del pasado diciembre, cuando la junta votó a favor de un «contra-split» que permitió llevar a cabo la agrupación de todas sus acciones y elevar su valor nominal de 0,001 euros a un euro. El accionista de referencia es Squirrel Capital con un 94,10% del capital.