Francia plantea un impuesto a las tecnológicas para ayudar a los medios

| 10 MAYO 2018 | ACTUALIZADO: 11 MAYO 2018 9:12

La libertad de actuación y fiscalidad de la que gozan Facebook y Google tiene los días contados en Europa. A la creación de un tributo sobre los ingresos digitales de gigantes como Google o Facebook que prepara el Gobierno español a propuesta de Bruselas, cabría sumar una iniciativa de Francia que busca cobrar una tasa en apoyo a los medios nacionales.

La propuesta, que por ahora no es más que un proyecto de ley, ha sido planteada por el diputado Patrick Mignola, del Movimiento Democrático (MoDem) ante la Asamblea Nacional francesa.

Se trataría de un impuesto que gravaría las actividades de las grandes tecnológicas siguiendo una fórmula similar al del mercado radiofónico, donde las emisoras pagan por emitir piezas musicales.

En el caso de que cristalice, supondría una solución más que aceptable a la reclamación que llevan haciendo los editores los últimos tiempos para cobrar por sus contenidos en Internet. Asunto de lo más espinoso que en España se saldó con el cierre de Google News.

Este gravamente ayudaría a paliar los efectos devastadores que ha tenido la crisis en la prensa de papel

Según su precursor, este gravamen ayudaría a paliar los efectos devastadores que ha tenido la crisis en la prensa de papel. Y lo haría ingresando cientos de millones de euros adicionales, que se redistribuirían directamente entre los editores de prensa y agencias galas.

Todo, asegura, sin representar un obstáculo a la directiva que prepara Europa y por la que los grupos digitales con una facturación superior a 750 millones paguen una tasa entre el 1% y 7% a los socios comunitarios. En base a los cálculos elaborados por países, España rascaría alrededor de 1.000 millones de las multinacionales.

De acuerdo con los plazos marcados por la asamblea francesa, la idea es aprobar el texto en primera lectura el 17 de mayo, aunque antes debe haber un acuerdo unánime de todos los partidos. En cualquier caso, la última palabra la tiene el partido del presidente Enmanuel Macron.

Para el diputado Mignola, la directiva europea plantea dos problemáticas que la ley francesa ayudaría a evitar. Por un lado, agilizaría la puesta en marcha de la medida, dado que en Bruselas se suelen manejar unos plazos más amplios para cualquier cuestión. Por otro, alargaría el periodo de acuerdo sobre el que aplicar el cálculo de estos ‘derechos’, que Europa fija en el último año.