Netflix

Netflix inicia la retirada de su plan sin anuncios más barato para potenciar la facturación publicitaria

| 24 ENERO 2024 | ACTUALIZADO: 25 ENERO 2024 10:35

El año pasado Netflix empezó en Canadá una estrategia encaminada a dirigir las nuevas altas a su versión con publicidad que después llegó a EEUU y Reino Unido. Se basaba en impedir que los clientes que llegaran por primera vez o reactivaran su cuenta escogieran el plan sin anuncios más barato, lo que creaba un espacio más amplio en el coste entre aceptar interrupciones comerciales o no hacerlo. Y en lo sucesivo la va a apuntalar con la retirada de esa versión en varios países, comenzando por Canadá y Reino Unido en el segundo trimestre del año. España es uno de los 12 mercados en los que actualmente conviven esos dos planes.

Este movimiento convierte de facto en premium la experiencia sin publicidad en comparación con lo que cuesta la que sí la que incluye (15,49 dólares frente a 6,99 en EEUU), lo que en principio debería favorecer el incremento de usuarios que consumen esta última. El último dato ofrecido por Netflix es de 23 millones de personas, cifra que se obtiene a partir del recuento de los diferentes perfiles que cualquier usuario puede crear al suscribirse a esa opción, hasta un máximo de cinco.

También se entiende en términos de mejorar ese negocio comercial el acuerdo con WWE, la empresa más importante detrás de la lucha libre americana profesional, que se sustancia en que Netflix emitirá durante 10 años los combates incluidos en el espacio Monday Night Raw. La plataforma pagará hasta 5.000 millones de dólares por esos derechos, que durante más de tres décadas habían sido de acceso exclusivo en televisión en línea, con opción de cancelar el trato tras los cinco primeros. Los grandes eventos clásicos de esa compañía como Royal Rumble o Wrestlemania están en manos de Peacock, el servicio de streaming de NBCUniversal, que a su vez tiene un amplio catálogo de peleas antiguas.

En el segundo trimestre desaparecerá de Canadá y Reino Unido aunque desde hace meses ningún cliente puede darse de alta en él.

El impacto de este acuerdo no empezará a verse hasta enero del año que viene, fecha en la que empezarán esas emisiones. El anuncio se produjo el mismo día en el que Netflix presentaba sus resultados trimestrales de la recta final del año pasado, en la que consiguió la segunda mayor adición de suscriptores de su historia. Los 13,1 millones de usuarios nuevos solo quedan por debajo del primer trimestre de 2020, el del estallido de la pandemia, en el que se incorporaron 15,77 millones de clientes.

Ese resultado mejora en un 50% lo que los analistas preveían y deja el dato global en algo más de 260 millones sobre los que la compañía totalizó una facturación de 8.830 millones de dólares, un 12% más que en el ejercicio anterior. Ambas cifras vienen potenciadas de manera significativa por la estrategia contra las cuentas compartidas que está aflorando nuevos usuarios en diferentes mercados clave y dejaron beneficios de 938 millones, la única variable importante que quedó por debajo de las previsiones de los analistas.