Cosas que no debes buscar en Google si quieres ser feliz

| 1 OCTUBRE 2015 | ACTUALIZADO: 1 OCTUBRE 2015 8:07

El rey de los buscadores se ha convertido en un habitual en nuestra vida cotidiana. Buscamos en Google para localizar la dirección de una tienda, conocer más información sobre un dato histórico o comprar un producto online. Pero muchas veces vamos más allá, y utilizamos el buscador para saber más de una persona a la que acabamos de conocer y hasta para encontrar soluciones a nuestro malestar, como si se tratase de la respuesta y solución para todo. Pero el problema es que nuestro cerebro, de forma inconsciente, acaba asumiendo que puede comprenderlo y controlarlo todo, y después hay sufrimiento y malestar cuando uno ve que no puede llegar a saber ni controlar algunas cosas. Más vale aprender a moverse en la incertidumbre, porque muchas veces la vida plantea dificultades y preguntas que sólo podemos resolver mirando en nuestro interior y viviendo la experiencia del día a día.

1. Cómo ser feliz. Irónicamente, para ser feliz es mejor que no busques en Google ni en ningún lado cómo serlo. La felicidad no te la podrá dar ninguna respuesta de fuera, ni mucho menos una respuesta racional, porque es algo muy personal que no se consigue analizando ni cumpliendo un listado de consejos de WikiHow. Esto no significa que no te inspires en fuentes de fuera para encontrar motivación y alegría de vivir, pero no esperes que nadie ni nada te dé la alegría que sólo puedes darte tú mismo.

2. Los mejores trabajos, las mejores casas o la mejor aplicación. Seguramente te has encontrado cenando con amigos y debatiendo sobre qué le gusta a cada uno, porque ya lo dice la expresión y es que “sobre gustos no hay nada escrito”. Esto pasaba hasta que apareció Internet, porque ahora estamos invadidos de bloggers, medios de comunicación y cualquier persona que tenga banda ancha que explica su punto de vista sobre cualquier tema, y hay más literatura escrita sobre gustos que la que hubo jamás. Por eso, filtra primero, y cuando tengas algún referente de calidad, entonces podrá interesarte su criterio sobre los mejores restaurantes, libros, trabajos o cualquier tema que trate y sea de su área.

3. Soluciones para tus crisis existenciales. Si conoces un buen profesional o medio de comunicación donde leer sobre temas de tu interés, síguelos en redes sociales o suscríbete a sus blogs, pero si buscas en Google, acabarás en cualquier página que no sabes si tienen el criterio que tú quieres. Filtra calidad primero y cuando tengas un tema de preocupación o sobre el que pensar, pregunta a un profesional o haz una búsqueda interna dentro de una web de confianza.

4. Síntomas de enfermedades. Muchas personas, más de las que uno imaginaría, buscan en el doctor Google cada vez que les duele la cabeza o notan cualquier cambio en su cuerpo. El problema es que es fácil acabar preocupándose más de la cuenta, cuando en realidad a menudo uno no tenía razones para pensar nada. Si te encuentras mal, ve al médico, pero no especules ni le des demasiadas vueltas, porque Google no sirve para todo.

5. Cómo curar un corazón roto. Hay búsquedas de este tipo en Google, por curioso que parezca. En realidad nos hemos acostumbrado a ir al gran buscador como antiguamente iban al oráculo de Delfos, en busca de cualquier respuesta. Hay cosas que sólo la vida, el tiempo y la experiencia nos pueden dar, y no hay soluciones lógicas ni técnicas para ellas, sino sólo la vida misma, en forma de aprendizajes, emociones y realidad cotidiana.