Inés Miranda: COVID-19: Mientras unos “se aprietan los cinturones” otros ven este periodo como una gran oportunidad

Una encuesta realizada por Ebiquity a 44 grandes marcas entre el 19 y el 31 de marzo del 2020, revela que:

– 2/3 de las marcas ya han reevaluado sus presupuestos de medios para el año que viene.

– El 80% planea reducir su presupuesto de inversión en medios para el resto del año. Más de la mitad, espera recortar la inversión en más del 20%.

– Las marcas prevén que los presupuestos para medios disminuyan en ~16%, mientras que los ingresos disminuyan en ~9%.

¿Por qué las marcas están decidiendo cortar sus inversiones en publicidad?

Quizás porque se tiene la mala creencia que lo que se ahorran en publicidad es más valioso que lo que puedan llegar a ganar con ella.

Sin embargo, aprendiendo de la historia y observando otras épocas de recesión, los anunciantes que mantuvieron o aumentaron la publicidad durante esos periodos, mantuvieron su margen de ganancias y se posicionaron en ventaja.

Mientras unos “se aprietan los cinturones” otros ven este periodo como una gran oportunidad para ganar tanto cuota de mercado como imagen de marca (incluso ventas en algunos sectores).

Y es que no hay que olvidarse que la publicidad suele tener un retorno positivo donde se genera más de lo que se invierte y, además, su respuesta no es inmediata. La inversión que se hace hoy genera ventas en el corto plazo durante 3 ó 4 meses (depende del producto y sector) y en el largo plazo hasta 2 ó 3 años.

«Se tiene la mala creencia que lo que se ahorran en publicidad es más valioso que lo que puedan llegar a ganar con ella».

Posiblemente en este periodo de incertidumbre los departamentos de marketing están recibiendo instrucciones de sus superiores, de sus globales, etc… sin poner los números y la experiencia en la toma de decisiones. Y es que no hay que olvidar que los periodos de recesión suelen ser más cortos que los periodos de no recesión.

Este es un momento en que las marcas tienen un papel importante que desempeñar en la atención de las nuevas necesidades de los consumidores. Se abren nuevas oportunidades donde construir relaciones con los clientes, sin caer en el oportunismo y comercialismo “barato”.

Aquellas marcas que sean capaces de adaptarse y conectar con los consumidores, saldrán reforzadas de esta crisis.