
Antiguos jefes de estado de Europa piden la segregación de la tecnología publicitaria de Google
Hasta 18 ex jefes de estado de diferentes países comunitarios ha pedido a la Comisión Europea que fuerce la segregación del negocio de tecnología publicitaria de Google, sobre todo por su impacto sobre la industria mediática del bloque.
Ya en junio de 2023 el ejecutivo comunitario concluyó tras una investigación de casi dos años que la desinversión forzosa puede ser la única alternativa para equilibrar el mercado.
Los firmantes del escrito, al que ha tenido acceso The Wall Street Journal, apoyan «acciones estructurales severas para terminar con el monopolio de Google sobre las tecnologías publicitarias digitales».
Y demandan que los reguladores europeos que investigan prácticas anticompetitivas en mercados digitales dispongan de «recursos y autoridad para implementar remedios que restauren la competición justa«.
La carta ha sido enviada en un momento determinante, ya que el relevo en la cartera de Competencia tras las últimas elecciones al Parlamento Europeo anticipa para algunos analistas una posición más moderada respecto a los gigantes tecnológicos extranjeros.
La española Teresa Ribera tomó el año pasado el relevo de la danesa Margrethe Vestager como comisaria de Competencia, después de que esta última haya impulsado una secuencia notable de multas e investigaciones sobre esas empresas en los últimos años.
Entre ellas está precisamente la que ha tenido como objeto las prácticas de Google en el negocio de la tecnología publicitaria. Desde que Vestager hizo públicas en 2023 la conclusiones que dejaban la segregación forzosa como un escenario viable, discurre una investigación bajo cargos que se espera que finalice próximamente.
Ribera indicó hace pocas semanas que el escenario de la desinversión obligada para Google está todavía sobre la mesa y que su departamento está trabajando con reguladores de otros países.
Un colectivo de 18 antiguos mandatarios de diferentes países apoyan la toma de «acciones estructurales severas» para proteger a los medios.
Otro factor clave que puede explicar la oportunidad de la carta es el retorno de Donald Trump a la Casa Blanca, con promesas de endurecimiento de las relaciones comerciales con terceros bajo el brazo. Ese contexto puede hacer menos viable una política regulatoria estricta con las compañías tecnológicas de ese país, por posibles represalias en términos de aranceles y otros ámbitos.
Además lo previsible es que la administración Trump sea menos dura con Google de lo que lo fue la de Joe Biden en términos de supervisión de prácticas anticompetitivas, lo que le daría un respiro en su mercado natal. La compañía llegó a ofrecer en julio de 2022 la segregación de partes de su tecnología publicitaria en su conglomerado matriz Alphabet, con intención de evitar una demanda del Departamento de Justicia que terminó llegando igualmente y que está pendiente de decisión judicial.