Google ofrece segregar en Alphabet partes de su tecnología publicitaria para evitar una causa antimonopolio
La presión del Departamento de Justicia de EEUU sobre Google de cara a una posible demanda por prácticas contrarias a la competencia empieza a tener efectos relevantes. The Wall Street Journal adelanta que el gigante tecnológico se muestra dispuesto a hacer concesiones para evitar llegar a ese escenario y entre ellas figuraría el de segregar parte de su tecnología publicitaria a otra compañía, siempre bajo el paraguas de su matriz Alphabet. El objetivo sería aplacar las alegaciones de abuso de posición predominante con las que el organismo ha concluido una investigación prolongada sobre la actividad de Google en el negocio publicitario digital.
No está claro si un movimiento de este tipo resultaría satisfactorio para el Departamento de Justicia, que está ya preparando una causa antimonopolio contra Google que podría lanzarse antes de que termine el verano. De ahí que la compañía esté negociando una eventual salida satisfactoria para ambas partes, algo que también está haciendo en la Unión Europea con cesiones como apertura de la venta de anuncios en YouTube a terceros operadores.
El Departamento de Justicia de EEUU está preparando una demanda que podría presentar antes de que termine el verano y el gigante tecnológico intenta evitarlo.
El gigante tecnológico ya tiene sobre la mesa en EEUU una demanda por tácticas anticompetencia para mantener su posición dominante en búsquedas desde hace casi dos años, y además afronta otra causa liderada por el fiscal general de Texas basada en el posible daño que hace a rivales de tecnología publicitaria y medios con su eventual monopolio en el segmento. Está por ver si el juez de este último proceso acepta o no su petición de desestimación. En Reino Unido hay desde mayo una segunda investigación abierta sobre ella, también enfocada en el impacto de su tecnología publicitaria en el mercado, y el Consejo Europeo de Editores la demandó en febrero por prácticas contrarias a la competencia.
La oferta planteada al Departamento de Justicia llega en un contexto cada vez más delicado para las grandes empresas tecnológicas en ese país, que está derivando en una mayor inversión en hacer lobby. Una reciente propuesta de ley de senadores contempla la prohibición de que aquellas que procesen más de 20.000 millones de dólares en campañas digitales participen en más de una parte de la cadena publicitaria, lo que impactaría de forma determinante a Google. Al ser el mayor actor en los segmentos de la oferta (SSP) y la demanda (DSP), así como en los mercados en los que se tramitan las transacciones, tendría que escoger solo uno de ellos para permanecer y debería desinvertir en el resto.
