Magnite duplicó ingresos en 2021 y confía en capitalizar los nuevos anunciantes que llegan a la televisión conectada
Las adquisiciones de SpotX y SpringServe han consolidado a Magnite como el SSP líder en televisión conectada (CTV). Así lo muestran los resultados de 2021, año en el que duplicó ingresos hasta los 468 millones de dólares, con un último trimestre que registró un aumento del 252% en facturación en ese soporte. La compañía aspira a ser el intermediario de referencia para los nuevos anunciantes que van llegando a él mientras los medios concentran sus esfuerzos de venta directa solo en los más importantes.
Otro aspecto clave para afianzar esa posición es el auge de los servicios de streaming monetizados mediante publicidad, que en un contexto de creciente de fatiga de suscripciones van ganando terreno. Magnite afronta 2022 con un negocio de CTV distribuido en tres patas: comisiones y acuerdos comerciales con editores para servir campañas en su plataforma, que aporta más del 40% de los ingresos del segmento en base a una tasa baja ; anuncios tramitados a través de su mercado específico, en torno a otro 40% de la facturación; y la administración de cuentas de servicio para inserción de órdenes, que supone un 15% con la mayor comisión por intermediación.
El SSP independiente más importante del mundo rentabiliza sus adquisiciones de los últimos meses de cara al auge del streaming financiado con publicidad.
La primera de ellas se verá reforzada por el reciente lanzamiento de Live Stream Acceleration (LSA), una tecnología diseñada para ayudar a los editores a optimizar su inventario de manera programática. En la segunda el objetivo es que los nuevos anunciantes que nunca han trabajado la televisión conectada y no están en el radar de la venta directa de los medios recurran a Magnite para poner en marcha sus campañas. La compañía estima que más allá de las 200 empresas que más dinero invierten en televisión en línea hay una oportunidad de miles de eventuales anunciantes que necesitan y necesitarán orientación para operar.
Sobre estas premisas Magnite espera facturar más de 500 millones de dólares en todo el año en curso, con un beneficio operativo ajustado de en torno al 35-40%. Y tiene previstas inversiones relevantes en el ámbito de las soluciones de la creación de audiencia, que con el final previsto de las cookies se desplaza al segmento de venta desde el de la compra.
