Prime Video ofrece tres planes de precios a los anunciantes para la llegada de la publicidad en EEUU
La inminente introducción de anuncios a gran escala en Prime Video irá acompañada de una estrategia de precio y producto publicitario en tres escalones, de cara a que la mayor cantidad posible de empresas pueda encontrar una proposición atractiva para invertir. Así lo muestra una presentación elaborada para planificadores a la que ha tenido acceso AdWeek, en la que se les explica en qué consisten las fórmulas Preferred Deal, Guaranteed Buy y Premium Sponsorships entre las que pueden escoger.
La primera de ellas es la más barata y solo está disponible mediante autoservicio gestionados por el DSP de Amazon y en principio tendría un CPM de salida de en torno a los 25 o 26 dólares que puede variar según el cliente y las circunstancias. Quienes compren espacios con Preferred Deal no tienen garantizado inventario pero sí pueden segmentar al público que buscan mediante atributos contextuales como títulos o género, además de con los valiosos datos de Amazon en torno a demografía o estilo de vida vinculados a sus hábitos de compras.
El segundo producto publicitario ya requiere gestión de personal de ventas y parte de un CPM base de alrededor de 35 o 36 dólares que da acceso a condiciones más específicas de personalización de campañas como “nuevos padres” o “recién mudados”. Guaranteed Deal permite además que por un precio similar los anunciantes puedan planificar de forma contextual sobre los 200 contenidos más exitosos de Prime Video. Tanto en este plan como en el anterior los CPMs son fijos y no estarán sometidos a vaivenes provocados por variables relativas a las subastas.
El servicio de streaming de Amazon intenta captar todos los anunciantes posibles con opciones de diferente coste e impacto para el estreno de la planificación generalizada a partir del 29 de enero.
Y finalmente, la tercera opción habilita patrocinios exclusivos de programas, de forma que ninguna otra marca aparezca vinculada a él durante su emisión. Por ello es la más cara y en función de las distintas variables asociadas su coste puede ir entre los 600.000 y los ocho millones de dólares.
La aceptación de estos planes podrá empezar a verse a partir del 29 de enero, fecha en la que los usuarios de Prime Video no paguen para evitarlo, empezarán a ver anuncios, como prolegómeno a una expansión internacional que llegará a España meses después. Y de su peso en el cómputo total dependerá que las cifras reales puedan aproximarse o no a la estimación de 7.000 millones de dólares de facturación para este año, en la que coincidieron hasta tres firmas de inversión en octubre.
