Pablo Alzugaray.

Shackleton mejora sus ingresos un 18%, hasta los 24,5 millones de euros

| 24 OCTUBRE 2017 | ACTUALIZADO: 25 OCTUBRE 2017 9:25

Todo apunta a que el futuro de las empresas de publicidad pasa por volver al pasado y ofrecer servicios integrados, sin silos en sus estructuras. Los resultados económicos de las agencias que operan en España ya lo están indicando.

Los grandes conglomerados de agencias están viendo como su negocio se estanca o, lo que es peor, se contrae. Así ha sido, por ejemplo, en el caso de GroupM, cuyo volumen de inversión gestionada bajó en 2016 un 2,2%; o el de Publicis Media (-11%).

Por el contrario, las antiguamente denominadas agencias de servicios plenos están viendo crecer sus ingresos. En esta situación se encuentra VCCP, que mejoró su facturación un 10%.

También es el caso de Shackleton, que llegó el año pasado a los 24,5 millones de euros de ingresos, lo que significa un crecimiento interanual del 18%. Gracias a ello, el margen bruto comercial aumentó en un 25,22% respecto al del ejercicio 2015.

Se trata del mejor año desde 2011, cuando la firma ingresó 35 millones de euros. A partir de ese año, la crisis hizo mella, a lo que se sumó la pérdida de clientes importantes (Loterías o Spanair), por lo que la cifra de negocios se desplomó hasta los 9 millones en 2013. Después vino la remontada y Shackleton lleva tres ejercicios seguidos de importantes mejoras interanuales en la facturación.

Para este año la compañía es optimista, ya que ha sumado a su portfolio una de las cuentas públicas más relevantes: Renfe.

En el último año fue posible por el gran número de nuevas cuentas, entre las que destacan Aena (CRM), Carrefour Omnicanal, Correos, Partido Popular (Elecciones del 26J), Enagás, Taco Bell, Durex o Stradivarius. Anunciantes que se suman a los que ya estaban en su portfolio, como Cruzcampo, Prisa, Sony, Abanca, Zurich, Almirall, o Marlboro. Desde el año pasado no están entre ellas Fotocasa o Desperados, que cambiaron de agencia.

Debido a esta mayor actividad, la agencia de Pablo Alzugaray pudo aumentar la partida de gastos en un 27%, hasta los 12,4 millones de euros. En este apartado, los costes de personal subieron un 5%, hasta llegar a los 7,3 millones de euros, para una plantilla de 166 empleados a cierre de 2016, según las cuentas oficiales recientemente depositadas en el Registro Mercantil.

La sede de Madrid aporta la mayoría de los beneficios

En cuanto al beneficio neto del grupo, fue de 686.000 euros, que es un 26% menos que en 2015. De esa cifra, Shackleton Madrid aportó un resultado positivo de 717.000 euros, mientras que la filial de Barcelona arrojó nuevamente números rojos (136.835 euros). En menor medida contribuyeron Opportunity Shck (+33.000 euros), Shackleton Buzz&Press (+68.000 euros) y Shackleton Chile (+3.000 euros).

Durante el año pasado, la compañía lanzó Shackleton Buzz&Press en Barcelona (ya tenía sede en Madrid), aunque su actividad fue todavía irrelevante, por lo que no ha tenido impacto en las cuentas del 2016.

Para 2017, la agencia fundada hace 13 años por los argentinos Pablo Alzugaray (presidente y CEO) y Juan Nonzioli (director general creativo) es optimista en términos de negocio. No en vano, acaban de ganar una de las grandes cuentas del ámbito público, como es la de Renfe (6,8 millones de euros) para los próximos tres años, según adelantó DIRCOMFIDENCIAL.