Bob Iger.

Bob Iger preparó a Disney para la pandemia sin saberlo

| 25 OCTUBRE 2020 | ACTUALIZADO: 27 OCTUBRE 2020 8:51

Cuando Bob Iger dimitió como consejero delegado de Disney con un año de adelanto, el coronavirus aún se veía como una amenaza lejana. Era el 25 de febrero y su plan de quedarse como presidente ejecutivo hasta agotar su contrato en 2021 parecía el corolario adecuado para 15 años de alta gestión que cambiaron el rumbo de la compañía. Pero las circunstancias le hicieron regresar a primera línea semanas después para ayudar a su sucesor Bob Chapek a afrontar un escenario inédito que pondría en valor algunas de sus decisiones estratégicas previas.

Desde esa perspectiva, la lectura de Lecciones de liderazgo creativo: Mi gran aventura al frente de la empresa que ha convertido la magia en realidad aporta un contexto clave para entender cómo Disney afronta la pandemia en mejores condiciones gracias a apuestas clave de Iger que no siempre fueron entendidas internamente. El libro fue editado en septiembre de 2019 como relato pormenorizado del ciclo de gestión en el que la compañía compró Pixar, Marvel, Lucasfilm y Fox, y se queda a las puertas del lanzamiento de Disney+, que se produjo a mediados de noviembre.

Todos esos movimientos quedan reivindicados en la última reorganización interna de la empresa, en la que el streaming se ha convertido en la primera prioridad. En apenas unos meses, Disney+ ha alcanzado el rango de usuarios que esperaba tener en 2024 como consecuencia de confinamientos episódicos y generalizados. Es la única nota positiva para el conglomerado de entretenimiento durante la pandemia, ya que ha tenido que prescindir de hasta 28.000 trabajadores de sus parques por la imposibilidad de operar normalmente y ha visto descender la facturación publicitaria de sus cadenas de televisión.

El libro de Iger es un repaso a la creación de una Disney más resiliente ante unas circunstancias que nadie esperaba vivir y desde un pasado reciente que todos querían superar. El autor había recibido en 2005 el encargo de dirigir una empresa que afrontaba los múltiples problemas internos y externos que reflejó James B. Stewart en Disneywar, tras haber ejercido como número dos de Michael Eisner en una relación a menudo complicada.

En esos 15 años Iger construyó un legado sólido para el futuro que algunos analistas consideraron que quedó después en manos inapropiadas, lo que explicaría en parte su regreso a la gestión. Bob Chapek, que había sido responsable de Parques y Experiencias, parece en la actualidad menos adecuado para el rol que Kevin Mayer, el antiguo responsable de negocios directos al consumidor que puso en marcha Disney+ y supervisó su expansión internacional. Este último abandonó la compañía tras perder la carrera por dirigirla para ponerse al frente de TikTok en EEUU.