Competencia propone sancionar a Telefónica por el precio del canal ‘Partidazo’
La CNMC ha propuesto la incoación de un expediente sancionador a Telefónica por el incumplimiento de los compromisos adquiridos tras la operación de concentración DTS en abril de 2015.
La resolución emitida por Competencia concluye que la compañía cobró de más a otros operadores en la contratación del canal de fútbol ‘Partidazo’ en la temporada 2016-2017. Un sobreprecio derivado de un error en el cálculo de costes fijos del citado canal, que Telefónica reconoció en septiembre de 2018.
Por ello, el regulador ha iniciado el procedimiento para imponer un expediente sancionador, tras entender que se incumplieron los compromisos ofrecidos para la aprobación de la toma del control de DTS (la antigua Sogecable) tras adquirir el 56% que poseía el grupo Prisa.
En el caso de los canales de pago, Telefónica debía y debe contar con una oferta mayorista para que sus competidores puedan acceder a sus canales de televisión de pago con contenidos premium (películas de estreno, competiciones deportivas nacionales e internacionales, etc.), y comercializarlos mediante sus propias plataformas de televisión de pago.
Para calcular el pago de los competidores por el acceso a los canales de fútbol y motor de la oferta mayorista Telefónica tiene en cuenta el llamado coste mínimo garantizado (CMG).
De esta forma, los canales de fútbol y motor están sujetos al reparto proporcional entre Telefónica y los operadores que los contraten de los costes fijos por el pago de derechos de emisión exclusiva, así como por costes de producción y otros conceptos (éste es el CMG). Este reparto proporcional se realiza en base a unos criterios predeterminados en los compromisos que incluyen la cuota de abonados a la televisión de pago de cada operador, así como la potencialidad de contratación sobre la base de sus redes.
En el caso de esta resolución la CNMC concluye que Telefónica debe ajustar los costes que fueron asignados a cada operador por el efecto de varias correcciones. Uno de estos ajustes es consecuencia de que la compañía consideró inicialmente un número de abonados inferior al que debería haberle correspondido, lo cual dio lugar por este factor a costes superiores para los competidores que contrataron este canal.