El Subjetivo, opinión a partir de una imagen

| 10 MAYO 2016 | ACTUALIZADO: 16 JUNIO 2016 9:39

Después de todo nada resulta indiferente. Están, claro, quienes optan por detenerse y quienes pasan de largo. Luego, entre los primeros, se cuentan los que deciden salir de su ensimismamiento y alzar una opinión sobre aquello que enfoca su mirada.

El Subjetivo es un proyecto periodístico dentro de otro (The Objective). Éste pone la imagen y el primero imprime la mirada o, lo que es lo mismo, la opinión. El Subjetivo es pues una readaptación del género de la columna que articula opiniones lúcidas e inteligentes sobre un mundo saturado de impactos visuales.

El proyecto está editado por Ignacio Peyró, articulista y editor, que sabe «que no todo es lo mismo y que algunas cosas han de mirarse con mayor detenimiento y seriedad». Y para ello se ha rodeado de un equipo de treinta columnistas, integrado por firmas como la de Melchor Miralles, Rafa Latorre, Andre Marmol, Leopoldo Abadía, Gabriela Bustelo y Cristian Campos.

DIRCOMFIDENCIAL conversa con Ignacio Peyró acerca de El Subjetivo.

El Subjetivo es una articulación de la mirada, una opinión sobre el fotoperiodismo.

Bueno, más que una opinión sobre el fotoperiodismo, el juego que se presenta es fácil e inmediato: alzar una opinión a partir de una imagen. No es la primera vez que se hace, aunque quizá no se ha hecho de modo tan expreso y tan extenso.

¿En qué género puede encuadrarse?

No creo que queramos reinventar nada, sino hacer bien lo de siempre –ese viejo género de la columna. Por la extensión de los textos, a uno le gustaría que fuesen una especie de glosas como las que han hecho Eugenio d’Ors o –sin el nombre de glosas y ya en nuestros días- Valentí Puig: es decir, artículos con un punto de sorpresa intelectual y un cierto “raccourci” estilístico. En la opinión de un diario hay mil y un formatos –largas tribunas como las terceras, sueltos, breves… y estas columnas cuya inteligencia, en buena parte, radica en la economía de palabras.

Ignacio-Peyro-Gibraltar-Lord-Byron_EDIIMA20150321_0161_5
Ignacio Peyró, editor de El Subjetivo.

¿La imagen se impone sobre la opinión?

Supuestamente vivimos en un tiempo de relativo ocaso de la palabra. Al menos, del respeto, la importancia en que se la tiene –la escritura, la lectura, etc. Frente a eso, nosotros lo que hemos decidido es fichar a treinta columnistas.

¿Qué papel desempeña el proyecto en el tiempo informativo actual?

Creo que tiene un valor muy propio el mero hecho de acoger gentes muy buenas y darles un lugar donde escribir. Hay que dar visibilidad al talento. Y aunque nuestro proyecto es muy modesto y está muy centrado en un solo ámbito –la opinión-, precisamente en este ámbito de la opinión creo que pocos medios nacionales cuentan con el plantel que felizmente hemos reunido.

¿Cómo ve la opinión en España?

Siempre hay nombres de calidad, aunque la tendencia general es declinante, y me refiero menos en esto a columnistas que a piezas de análisis sobre cuestiones de actualidad. Me sobran tantas listas (“las nueve razones para…”) y echo en falta esos análisis más sesudos.

¿Qué aporta la opinión de calidad?

Un poco de lucidez e inteligencia frente al mundo, el placer de una prosa bien torneada y, ante todo, el saber que no todo es lo mismo y que algunas cosas han de mirarse con mayor detenimiento y seriedad –por eso una buena opinión puede ser tan fecunda para una democracia.

¿Cuáles son los aspectos que ha tenido en cuenta para formar el equipo de firmas?

Hemos intentado reunir un equipo intelectualmente más que solvente, donde cada uno tenga cosas de interés que decir. También hemos querido que haya un variedad de espectro en lo ideológico, aunque –eso sí- con todo el mundo cortado por un patrón de moderación y carácter dialogante. En el fondo, el ideal era atraer a gentes que –aunque suene pretencioso decirlo- pudiesen haber integrado con bien una ponencia constitucional.

¿Por qué había que relanzar la opinión de The Objective?

Creo que un proyecto de opinión pegado a la realidad y a la vez con ambición intelectual es algo poco frecuente. Y creo que es también parte de la responsabilidad de los editores apostar por firmas que, más o menos conocidas, vayan a tener una gran proyección en el futuro. Eso es lo más importante como editor –apoyar el talento. Y el nuevo Subjetivo está pensado para eso. Lo que me atrajo del proyecto fue justamente poder compactar un grupo de calidad y con recorrido.

¿Su experiencia como columnista y editor ayuda?

He tenido que escribir artículos y columnas en mil y un lugares, y creo que un proyecto como el del Subjetivo me hubiera sido muy estimulante. También es –desde luego- un placer estar tan bien acompañado.