¿Es acertada la apuesta de las OTTs por recuperar programas de televisión? Los expertos opinan
Las plataformas en streaming en España siguen dando pasos firmes en su estrategia por dominar el consumo del entretenimiento, en un contexto en el que la audiencia de la televisión tradicional va cayendo progresivamente.
El último gran salto en experimentación lo marca la emisión en directo de formatos de éxito en la televisión convencional. Por un lado, OT, el talent show musical más seguido de la historia de la televisión, se muda este otoño al ecosistema del streaming, de la mano de Prime Video, la pionera en este formato en España.
Netflix también movido ficha con una propuesta tan sorprendente como arriesgada. La reina de las OTTs ha abierto los brazos a Sálvame, después de que Mediaset anunciara ponerle punto final tras 14 años en emisión y notables audiencias. En concreto, la plataforma quiere ofrecer «un programa transgresor, divertido y muy loco con las ocho caras más conocidas de Sálvame«, según adelantó RAC1.
Con estos contenidos, las plataformas en streaming buscan captar a nuevos públicos, tradicionalmente familiarizados con la televisión convencional, y ofrecer nuevos espacios a comunidades más jóvenes, públicos asiduos de las OTT.
«Una apuesta segura»
La profesora de la UOC y experta en plataformas digitales, Elena Neira, confía en que estas apuestas funcionarán en streaming. “Teniendo en cuenta los buenos resultados que este tipo de programación tiene en televisión convencional es lógico que las plataformas quieran arañar parte de este público. La cobertura que estos dos servicios tienen en nuestro país unido a la popularidad de estos formatos, lo convierten en una apuesta segura”, opina.
Más cauteloso se muestra Alejandro Rincón, Strategy Director de Dos30, agencia audiovisual especializada en el análisis de audiencias de televisión, al indicar que “la estrategia de las OTT pasa por captar público de la televisión tradicional que hasta ahora no eran capaces de atraer. Ahora bien, no sabemos si esta estrategia se traducirá en buenos resultados económicos para las plataformas, ya que hablamos de programas con un presupuesto muy elevado, como es el caso de Operación Triunfo”.
Sobre ello, Neira añade que “han debido pasarse meses cruzando datos de consumo de sus usuarios para confirmar que tienen una audiencia potencial lo suficientemente grande para justificar el desembolso”.
Twitch estuvo cerca de recuperar el Grand Prix
Otra de las noticias televisivas del año es el regreso del mítico programa el Grand Prix, presentado por Ramón García. Este verano Radiotelevisión Española se hará cargo de la batalla entre pueblos más seguida en España, 14 años después de su cancelación.
Aunque la Corporación pública será quien ofrezca finalmente «el programa del abuelo y del niño», en los últimos meses se barajó la idea de trasladarlo a Twitch, de la mano de Ramón García e Ibai Llanos. Una propuesta que, pese a no haber surtido efecto, también pone de manifiesto el alto interés que muestran los canales en streaming, especialmente usados por jóvenes, por espacios convencionales de éxito.
El Strategy Director de Dos30 defiende que la acogida del programa por parte de la audiencia podría variar en función del operador que lo emita. Puntualiza que “el público de TVE y el de Twitch son totalmente opuestos. Además, el Grand Prix juega con la nostalgia de los espectadores que forman parte de un público que poco tiene que ver con Twitch”.
A la espera de conocer resultados de audiencia en TVE, Rincón añade que, de entrada, “es una apuesta muy arriesgada que no sabemos si cuando finalicen sus emisiones llegará a ser rentable para la entidad pública”.
El caso opuesto: del streaming a la televisión convencional
En este nuevo paradigma del consumo de entretenimiento, televisiones convencionales también han optado por adueñarse de modelos propios del streaming, respaldados por los públicos más jóvenes.
Mediaset es un ejemplo de ello con la emisión de la Kings League y Queens League en Cuatro, la exitosa liga de fútbol siete dirigida por Gerard Piqué retransmitida en Twitch. Sin embargo, los expertos con datos de audiencia sobre la mesa, certifican el ‘pinchazo’ de este campeonato en televisión.
Rincón considera que “es un error pensar que si emitimos en televisión tradicional un contenido dirigido a un público joven va a traernos espectadores jóvenes y vamos a rejuvenecer el canal”. Reitera que “hay que ser muy cuidadosos a la hora de comprar contenidos que provienen de plataformas digitales, ya que la televisión tradicional y los medios digitales no comparten el mismo público”.
“Es un error pensar que si emitimos en televisión tradicional un contenido para jóvenes vamos a rejuvenecer el canal”.
El portavoz de Dos30 recomienda “estudiar detenidamente qué tipo de público consume ese contenido y analizar si encajaría en la programación de una cadena tradicional, antes de comprar un contenido digital”.
Los expertos consultados muestran visiones opuestas en torno a la apuesta de las plataformas por los programas de entretenimiento. Neira opina que “hay suficientes casos de éxito” que confirman que este formato despegará en las OTTs —como Love is Blind en Netflix—. Sin embargo, Rincón responde que “hay formatos que difícilmente van a funcionar en las OTT y que jamás desaparecerán de las televisiones tradicionales. Hablamos de los programas informativos, programas de actualidad y grandes shows de entretenimiento”. A su juicio, “los programas en directo seguirán reinando en la televisión tradicional, mientras que las plataformas son perfectas para contenidos más atemporales”.
Prime Video y Netflix han sido las primeras OTTs en España en llevar la delantera con formatos de éxito en televisión convencional, bajo la atenta mirada de sus competidores, expectantes por comprobar resultados.
