Impagos, éxitos y deudas: los claroscuros de las productoras de José Luis Moreno

La detención -y posterior puesta en libertad bajo fianza- de José Luis Moreno el pasado miércoles tras ser acusado de liderar una organización criminal y haber estafado, supuestamente, más de 50 millones de euros ha reabierto un cajón de desacuerdos e impagos con la figura del productor y sus propias empresas en el centro de la diana. Pero, ¿siempre fue así? ¿Qué hay detrás de estas productoras?

Para llegar hasta el entramado hay que remontarse décadas atrás, hasta 1988, cuando el popular ventrílocuo se lanzó a la producción de formatos televisivos creando su propia empresa, Miramón Mendi, con la que vivió su época dorada. De Noche de fiesta (TVE, 1999-2004) a Aquí no hay quien viva (A3, 2003-2006), este madrileño se convirtió en un habitual de varios proyectos televisivos nacionales e incluso internacionales a través de la RAI. Hasta que la burbuja explotó.

En 2006 Telecinco hizo un movimiento que cambió el rumbo de los acontecimientos: llegar a un acuerdo con el productor para adquirir el 15% de sus sociedades audiovisuales. Esto incluía los estudios de grabación y platós de Kulteperalia SL y su productora Miramón Mendi, posteriormente llamada Alba Adriática. Un hecho que dejó a Antena 3 sin su serie estrella y que derivó en el trasvase de la misma a la cadena de Fuencarral.

José Luis Moreno fue detenido el 30 de junio por, supuestamente, liderar un entramado empresarial con el que habría defraudado más de 50 millones de euros.

Sin embargo, la ruina de estos estudios televisivos ubicados en naves del Polígono Barrionuevo de Madrid llevó a Moreno a hipotecar con Caja Madrid dichos espacios por cinco millones de euros. Y no sólo eso. En 2011, pese a las circunstancias de los mismos, le valieron al productor para negociar sus problemas con Hacienda. Y es que este madrileño tenía una deuda de dos millones de euros y otra de casi 300.000. Para entonces Telecinco ya había vendido sus acciones en la productora.

No fue hasta 2019 cuando, en otro movimiento de Moreno, optó por ceder esta hipoteca, que ya había escalado hasta los 5,9 millones, a la sociedad bajo la que produjo la serie Reinas, una supuesta coproducción con la BBC –lo vendió así pero no hubo ningún tipo de coproducción–, que supuso una inversión de dos millones de euros y que se emitió en TVE con una de las peores recepciones de la historia por parte de la audiencia en cuanto a series se trataba.

Sin embargo, Moreno contó con el apoyo del que por aquel entonces era presidente de RTVE, José Antonio Sánchez, elegido durante la etapa en el Gobierno del Partido Popular y con quien coincidió con el productor en los papeles de Bárcenas. Una coincidencia muy criticada por parte de los trabajadores de la Corporación que vieron cómo el máximo dirigente de la misma se saltó la norma obligada de no firmar acuerdos con personas físicas y empresas que no estuviesen al día con Hacienda.

Finalmente, el mal rendimiento de Reinas hizo que Crystal Forest, la productora de esta serie, concluyese 2016 con unas pérdidas de 1,1 millones de euros. Y, si bien es cierto que un año después lo redujo hasta los 86.000 euros, los resultados de esta empresa desaparecieron. Hasta ahora.

El motivo no es otro sino que el 28 de junio José Luis Moreno volvió a aparecer en la lista de morosos de Hacienda y en consecuencia también sus empresas: Kulteperalia SL debía a la Agencia Tributaria 1,6 millones de euros y Alba Adriática superaba el millón.

El problema es que para entonces estas empresas ya acumulaban varias polémicas por irregularidades. Una de ellas con el Ayuntamiento Madrid al no cumplir con la construcción de un ambicioso proyecto cultural en el que supuestamente iba a invertir 164 millones de euros. Se llamaría Coliseo de las Tres Culturas y estaría amadrinado por Montserrat Caballé. Pero nunca se colocó una piedra en dicha construcción.

Otro, con el Ayuntamiento de Valencia por la gestión del Teatro El Musical, el cual adquirió Moreno entre 2013 y 2015. No obstante, el Consistorio municipal de la localidad decidió rescindir el contrato dos años antes porque el dinero que debía abonar la productora de Moreno para el proyecto realmente se desvió para saldar sus deudas con Hacienda.

Estaba preparando una serie

Todos estos acontecimientos no hicieron parar a Moreno en sus acciones. De hecho, actualmente se encontraba supuestamente preparando una nueva serie histórica titulada Glow y Darkness cuyo presupuesto ascendería entre los 260 y los 280 millones de euros. No sólo eso. También contaría con un reparto de lujo internacional. Pero de nuevo se trataba de humo.

En esta ocasión la producción correría a cargo de Dreamlight International Productions y contaría con Moreno como director. Sin embargo, la falta de inyección de dinero en el proyecto obligó a pararlo.

Así se llega al tiempo presente, a la Operación Titella y a la detención el pasado miércoles 30 de junio del productor por un entramado empresarial con su figura como cabecilla con la que habría defraudado más de 50 millones de euros, tanto a bancos como a empresas y personas particulares. Pero, si bien es cierto que el productor salió en libertad bajo fianza por valor de tres millones de euros y su comparecencia semanal en los juzgados, el resultado de dicha causa acaba de comenzar. El final de la historia se definirá ante la Justicia.