Más streaming y más deporte: la estrategia de Disney para paliar los efectos de la pandemia

| 25 JUNIO 2021 | ACTUALIZADO: 28 JUNIO 2021 8:48

Disney quiere reformularse. El gigante estadounidense ha sufrido profundamente la pandemia mundial a causa de la Covid-19 y se ha visto obligada a transformarse, convertirse, y apostar por otro tipo de contenidos a sus tradicionales. Y es que el cierre de sus parques de atracciones ha supuesto una gran problemática para los resultados de la empresa, que han tratado de aguantar gracias a la plataforma OTT de la compañía.

Sin embargo, eso no ha impedido que los ingresos de la empresa matriz hayan caído un 6% en su último año fiscal, de los 69.607 millones de dólares logrados en 2019 a los 65.388 millones de 2020, los cuales han derivado en unas pérdidas netas de 2.832 millones. Una crisis impulsada por el cierre de los ya citados parques temáticos y las salas cinematográficas. Porque en 2019 el 19% de la taquilla mundial de 2019 tuvo la firma del ratón.

Ante tal realidad, para tratar de paliar los efectos pandémicos, la compañía ha puesto el foco en su plataforma de streaming, la cual cuenta ya con unos 104 millones de suscriptores. Una cifra nada desdeñable que, sin embargo, no es suficiente para las estimaciones intuidas, ya que los analistas esperaban al menos alcanzar los 109 millones.

Uno de los motivos es la nueva normalidad social, la cual cada vez es más abierta a los eventos sociales fuera del domicilio, y a la vacunación. Por ese motivo, entre otros aspectos, el precio medio por usuario ha caído un 29%. ¿Cómo pretende paliar estos datos? Trasladando los títulos de cientos de canales alrededor del mundo a este nuevo gigante audiovisual.

Por eso mismo el grupo adoptó la decisión de estrenar títulos fílmicos en Disney+ en vez de en las salas de exhibición. No obstante, todos aquellos usuarios que querían ver dichas películas –véase Mulán– debían pagar un precio –21,99 euros en España– por alquilarla. Pero, pese a la abultada cifra a desembolsar por los suscriptores, les salió bien.

Todas las pruebas que ha realizado durante los últimos meses, como la del estreno de películas que tradicionalmente irían a salas de exhibición en su plataforma digital, han llevado a la compañía a aumentar su apuesta por la OTT y como contraposición cerrar un centenar de canales lineales, según informó Bloomberg. El objetivo es que la mayoría del contenido migre a Disney+ para ser aún más competitivos en la llamada streaming war.

A todos estos títulos habrá que sumar el contenido de Star, que desde este febrero ya puede verse en la plataforma disponible en España. Y no sólo eso. A la inversa, también se firmó este pasado marzo un acuerdo multianual entre la compañía del ratón y Movistar para distribuir sus contenidos en la plataforma de Telefónica. Esto incluye Disney, Pixar, Marvel, Star Wars o National Geographic, entre otros.

La apuesta por el deporte

Esta es una de las medidas adoptadas por Disney, pero hay más. Y es que la compañía del ratón ha apostado fuertemente por comprar derechos audiovisuales deportivos como contrapartida a la crisis. Por eso, la compañía ha anunciado una inversión de 37.900 millones de dólares por derechos de este tipo de contenidos que incluye los del fútbol español en Estados Unidos hasta la temporada 2028-2019.

Así es. Disney ha llegado este mayo a un acuerdo con LaLiga por valor de 1.400 millones de dólares, es decir, 175 millones de dólares por temporada, para arrebatar a beIN Sports los derechos de la competición futbolística española en el país norteamericano. Una férrea apuesta que incluirá las coberturas en directo a través del streaming y repeticiones bajo demanda. ¿Dónde podrá verse? En ESPN, un importante canal temático deportivo que emite en Estados Unidos y cuya propiedad reside mayoritariamente en Disney.

Aunque no ha sido el único movimiento en este aspecto. En los últimos meses también ha renovado su contrato por la Major League Baseball (MLB) estadounidense y firmado un acuerdo para emitir durante las diez próximas temporadas los contratos de la National Hockey League (NHL) y la National Football League (NFL); este último por la cuantiosa cifra de 27.000 millones de dólares, es decir, 2.700 millones por temporada.

Ajuste de plantilla

La cuestión en este punto es cómo va a hacer frente a los nuevos contratos estando en un periodo económico con cierta dificultad. Sin embargo, Disney ya anunció una solución. Y es que, en vista de las grandes pérdidas derivadas de los parques temáticos –sólo en los tres primeros meses de 2021, los ingresos computados por estos servicios han descendido un 44% en comparación con 2020–, en noviembre de 2020 anunció la destrucción de 32.000 empleos relacionados con esta área de sus servicios alrededor del mundo.

El motivo: de las 203.000 personas que en octubre del año pasado estaban empleadas en todo el planeta en la compañía, 155.000 se dedicaban directamente a sus parques de atracciones. Un desembolso que Disney ha buscado ajustar para entroncar su estrategia en la palabra empresarial de moda: digitalización. Y esta tiene por apellido Disney+.