Solo 1 de cada 10 millennials ve la televisión convencional

| 23 NOVIEMBRE 2016 | ACTUALIZADO: 23 NOVIEMBRE 2016 10:54

Después de dormir y trabajar (o estudiar), la actividad a la que dedican más tiempo los españoles es a ver la televisión. Aunque, según las métricas, cada vez es menor, ya que ha pasado de los 246 minutos por persona en 2012 a los 229 en 2016. Por promedio, supone el 16% de la ocupación del día, si bien el porcentaje se eleva hasta el 19% en la población de entre 45 y 64 años y al 24% a partir de esta edad. Se tratan de unos niveles muy similares a los de Europa y Estados Unidos, donde el consumo televisión lineal se sitúa muy próximo.

Son los datos que se desprenden del último informe elaborado por Barlovento Comunicación, donde se destaca que el consumo de televisión diario ha caído cinco minutos con respecto al año pasado y diecisiete en comparación con 2012. Aún teniendo muy presente que se trata de un fenómeno de marcado carácter estacional, el dato sigue una tendencia que no por ser paulatina es ignorada por los principales operadores de nuestro país.

El informe pone negro sobre blanco que más del 90% de los niños y los jóvenes no suelen ver la televisión convencional. Concretamente, tan sólo el 9% en el caso de la población que va de los 4 a los 12 años y del 8% entre la de 12 y 24 años. Sin embargo, el dato no es mucho mejor entre los individuos un poco más maduros (de 25 a 44 años), donde el consumo llega al 13%.

El target comercial más perseguido por los anunciantes es también el más minoritario paradójicamente

De esta manera, el target comercial más perseguido por los anunciantes es también el más minoritario paradójicamente. Situación que no parece afectar lo más mínimo a la facturación publicitaria de los dos grandes de comunicación, Atresmedia y Mediaset, que alcanza los 1.328 millones de euros en los nueve primeros meses del año.

Aunque esta caída en el tiempo que pasa la gente frente a la pequeña pantalla se explica, al menos en parte, en la popularización de la navegación por Internet, no se puede decir que el consumo de vídeos y programas haya caído. Hace tiempo que a los datos de la ventana de emisión en directo se sumaron los de en diferido y bajo demanda. No en vano, no todas las compañías hacen públicos estos datos pese a que la tendencia de los últimos años evidencia un cambio de hábito a favor de la televisión a la carta en detrimento de la lineal.

Este cambio de comportamiento ha sido previsto por los grupos televisivos, que han puesto a trabajar a su personal de digital en el desarrollo de plataformas de vídeos cortos. Como fruto de este trabajo Atresmedia lanzó Flooxer hace unos meses, mientras que Mediaset puso en marcha Mtmad a principios de noviembre. Ambos proyectos funcionan como rampa de lanzamiento hacia la relación que pretenden tener las compañías con las nuevas audiencias, basada en un proceso de adaptación a la exigencias de demandas.