Unidad Editorial apuntala su recuperación a base de una mayor eficiencia en el gasto
Las cuentas de Unidad Editorial nunca han sido poesía. No lo fueron en el momento de su alumbramiento ni cuanto menos durante la crisis. ¿Quién le iba a decir a los fundadores de la compañía que antes de teñir los números de rojos a negros tendrían que pasar por infinitas reorganizaciones, cuatro expedientes de regulación de empleo, cambios de manos en la propiedad y muchos, muchos recortes?
Los últimos resultados trimestrales, no obstante, han arrojado luz y cambios de tendencia, aunque todavía es pronto para determinar si pasajeros o consistentes.
Según ha comunicado RCS Mediagroup, la matriz de la editora de El Mundo y Expansión ha logrado convertir los 4,9 millones de euros que perdió entre enero y septiembre del 2016 en unas ganancias de 1,3 millones de euros en este 2017. Se tratan, eso sí, de resultados operativos netos (Ebit), en los que no están descontados los impuestos.
Detrás del cambio del rojo al negro no hay ningún crecimiento orgánico, de hecho los ingresos se han contraído un 6,9%, llegando a los 213 millones de euros, 15,7 menos que en el mismo periodo del año pasado. Tampoco se encuentran posibles oportunidades de nuevo negocio, puesto que la venta de ejemplares no encuentra suelo a su descenso y la publicidad ha experimentado la ralentización en la inversión digital.
La vuelta al beneficio operativo, que ya se vivió en el primer trimestre del año y se rozó en el segundo (0,5 millones de euros) es consecuencia de la gestión sobria y puntillosa que impuso su máximo dueño, Urbano Cairo, desde la primera vez que puso el pie en la madrileña avenida de San Luis.
Para bien y para mal, el plan de eficiencia no ha sido en balde y se ha traducido en un ahorro de 17 millones de euros hasta la fecha. En este tiempo, los costes operativos de Unidad Editorial se han recortado un 13%, lo que ha permitido cerrar septiembre con un gasto de 200 millones de euros.
RCS dobla sus resultados
RCS quiere ser el espejo en el que se mire su filial española. Lo cierto es que, en este sentido, el roto en la caída de facturación ha sido más fuerte en la dueña del Corriere della Sera. En concreto, ha ingresado 657,7 millones de euros en los nueve primeros trimestres del año, un 12,8% menos que en 2016.
El mercado de la prensa no marcha mucho mejor en Italia, de manera que los ingresos por circulación del grupo cayeron un 9,5% , hasta los 263,2 millones de euros, mientras que la publicidad experimentó una corrección del 10%, hasta aportar 284,4 millones.
Pese a lo anterior, el Ebitda de RCS alcanzó los 84,4 millones de euros, esto es, más del doble que los 40 millones que ganó en septiembre del año pasado. Así, el resultado final cerró en positivo: 19,8 millones de euros, frente a los 17,4 millones de perdidas del año pasado.
