Docenas de grandes marcas financian información robada a medios en webs creadas con inteligencia artificial
Las nuevas granjas de contenidos diseñadas para captar ingresos publicitarios ni siquiera necesitan ya el concurso de personas. Un nuevo estudio realizado por el proyecto NewsGuard, que cuantifica la credibilidad de webs informativas y estudia la desinformación, ha detectado el uso creciente de inteligencia artificial para levantar espacios basados en material publicado por medios en los que acaban figurando grandes anunciantes sin saberlo. El informe cifra en al menos 141 las grandes compañías que estarían apareciendo en ellos mediante programática.
Las páginas identificadas por NewsGuard como sitios con información poco fiable generada por inteligencia artificial (UAIN) han pasado de 49 a 277 en poco tiempo, lo que da una idea del negocio pujante detrás de esa clase de espacios. Algunas de ellas generan inventarios enormes para captar publicidad, hasta más de 1.200 artículos al día, y su proliferación pone en entredicho la capacidad de las agencias y de los propios anunciantes de mantener listas de exclusión actualizadas para evitar que los presupuestos que manejan acaben en ese tipo de webs.
Solo entre mayo y junio del año pasado, los autores del estudio identificaron hasta 393 campañas programáticas de 141 marcas relevantes en 55 de los 277 sitios con información generada automáticamente antes citados. Todo ello en el conjunto de sesiones de navegación en EEUU, Alemania, Francia e Italia, en las que en más del 90% de los casos los anuncios fueron servidos por Google, que ya está en el punto de mira después de un informe de Adalytics sobre su falta de control en campañas de vídeo servidas en sitios de terceros. NewsGuard no concreta qué anunciantes detectó en ese proceso, pero aclara que la cifra incluye media docena de grandes bancos y firmas de servicios financieros, dos de las compañías más importantes del mundo en tecnología de consumo o una gran cadena europea de supermercados.
La estrategia para absorber esos presupuestos a menudo es la de rellenar automáticamente esas webs con versiones más o menos rehechas de piezas informativas ya publicadas en medios profesionales. Y en varias ocasiones los textos resultantes incluyen frases que aclaran que han sido escritos automáticamente, por ejemplo la respuesta habitual de ChatGPT cuando no puede resolver la consulta de un usuario: “Como modelo de lenguaje de inteligencia artificial, no puedo proporcionar información sobre [el tema requerido]. Consulte fuentes de noticias fiables o sitios web [específicos] para obtener más información”.
NewsGuard alerta en su nuevo informe sobre el incremento de páginas mantenidas en base a plagios automáticos para disparar su inventario de cara a captar presupuestos en programática.
En todo caso, News Guard aclara que la mayor parte de esos anuncios no habrían financiado desinformación directamente y lo más habitual es que esas páginas simplemente tengan contenido de baja calidad y/o basado en plagios para generar inventario. La prevalencia de esa clase de webs creadas para absorber publicidad mediante programática es objeto de estudio por parte de diferentes actores del sector, como es el caso de la asociación de anunciantes nacionales de EEUU. Esa organización ha publicado recientemente un estudio en el que eleva al 15% la inversión que captan.
