El negocio de podcast de Spotify se asoma a la rentabilidad tras los despidos y el fin de la exclusividad
En el último trimestre de 2024 la operativa vinculada a la explotación de podcast en Spotify estuvo cerca de alcanzar los deseados números negros. Así lo indicó el consejero delegado Daniel Ek durante la presentación de los resultados correspondientes a ese periodo, en el que la facturación publicitaria alcanzó un nuevo máximo histórico con 501 millones de euros gracias a crecimientos de doble dígito asociados tanto a ese formato como a la música. Eso supone un 14% de la facturación total, un nuevo récord porcentual sobre los 3.671 millones consignados, y en principio la nueva estrategia favorece su crecimiento alrededor de los podcast.
Eso se debe a que Spotify ha abandonado el modelo de exclusividad con el que venía operando, de cara a operar como distribuidor y exclusivista comercial de programas populares como los de Joe Rogan o Alex Cooper en otras plataformas. Eso incrementa las opciones de monetización publicitaria, especialmente gracias a YouTube, que es el entorno más utilizado para consumir podcast y cuyo interés por el formato se ha sustanciado en buscarle acomodo en su servicio Music.
Además de este giro para aumentar los ingresos, la eventual entrada del negocio de podcast de la compañía en rentabilidad durante este año se deberá igualmente a los ajustes ejecutados en los últimos tiempos. En 2022 Spotify redujo en dos ocasiones sus costes vinculados a esa operativa con despidos y cancelación de programas originales, así como con la reestructuración y reorientación de la división. Y su plantilla dedicada se vio igualmente afectada por las tres tandas de despidos de 2023 en toda la compañía que llevaron a la salida de unos 600 empleados en febrero, 200 en junio y otros 1.500 en diciembre.
El resultado de ese último proceso, que causó la salida forzosa del 17% de la fuerza de trabajo total, impactó en las cuentas del trimestre de referencia en forma de pérdidas operativas de 75 millones de euros, que en todo caso mejoran los números rojos de 231 millones del año anterior. Las indemnizaciones vinculadas a los despidos aumentaron un 6% los costes operativos, junto con algunas operaciones de optimización de espacio de oficinas relacionadas con ese recorte de personal.
Tras esos ajustes severos de plantilla que la ponen en línea con otros gigantes tecnológicos, las perspectivas de la compañía son positivas porque terminó el año mejorando expectativas internas en nuevos usuarios. Incrementó en 10 millones la base de los clientes premium y dejó la cifra total en 236 millones, un 15% más que en 2022, mientras que la cifra total de oyentes aumentó un 23% para superar los 600 millones. En 2023 sumó 31 millones de usuarios de pago, un récord histórico que la compañía atribuye en parte a mejores resultados de lo esperado en campañas promocionales y que ha alcanzado a pesar de haber subido precios por primera vez en sus 15 años de existencia en docenas de mercados.