Mark Zuckerberg.

Facebook está dispuesto a someter sus algoritmos a supervisión de reguladores para demostrar que no son dañinos

| 13 OCTUBRE 2021 | ACTUALIZADO: 13 OCTUBRE 2021 9:10

La enésima crisis de imagen de Facebook provocada por las filtraciones de la exempleada Frances Haugen podría conllevar nuevos niveles de escrutinio. Al menos según Nick Clegg, vicepresidente para Asuntos Globales y Comunicación, que habló en una entrevista en CNN de la eventual predisposición de la red social a que sus algoritmos sean auditados. De esa forma garantizaría que los resultados que ofrecen no están dañando a los usuarios y contrarrestaría las propias investigaciones internas reveladas por The Wall Street Journal y contextualizadas por Haugen ante el Senado.

Clegg apuntó en su intervención, una de varias en los últimos días, que “necesitamos mayor transparencia y los sistemas que tenemos deberían estar sujetos a supervisión, si es necesario, mediante regulación que permita que la gente pueda ver que coincide lo que se supone que hacen con lo que realmente sucede”. Pero en todo caso viene defendiendo que los filtros algorítmicos de la plataforma son necesarios para evitar spam y publicaciones problemáticas. “Si lo quitáramos lo primero que sucedería es que la gente vería más discurso de odio, no menos. Más desinformación, no menos. Más contenido dañino, no menos”, contó a ABC News.

El portavoz principal de la compañía también ha agregado en los últimos días que Facebook está trabajando en nuevas funcionalidades que permitirán que los padres controlen mejor la experiencia de sus hijos en sus servicios. Y además prepara el lanzamiento de un recordatorio automático para que los jóvenes se tomen un respiro de Instagram cuando la aplicación detecte que han pasado mucho tiempo usándola, así como un aviso de que ignoren contenido que pueda ser inadecuado para su bienestar.

La plataforma intenta contrarrestar la mala imagen ofrecida por las filtraciones de documentación interna con nuevas medidas que evitarían las consecuencias que describe.

Estas propuestas aparecen en pleno debate sobre si Facebook hace lo suficiente para que sus servicios no generen externalidades negativas como consecuencia de algoritmos refinados constantemente para obtener atención. En su comparecencia ante el Senado, Haugen explicó que la compañía antepone el crecimiento de sus ingresos al bienestar de los usuarios a los que sirve, especialmente en el caso de menores de edad.

Precisamente parte de la documentación que filtró a The Wall Street Journal demostraría que la red social ha estado trabajando durante años bajo la perspectiva de que necesita enganchar a ese segmento para garantizarse relevancia publicitaria a futuro, lo que explicaría sus planes de lanzar una versión de Instagram para menores de 13 años. De momento ese plan ha sido aplazado, y Facebook cuenta con un infrecuente consenso en contra entre republicanos y demócratas para que lo suspenda definitivamente.