BBC

BBC recaudó un 5% menos por el canon y registró 119 M en pérdidas antes de la debacle por el coronavirus

| 17 SEPTIEMBRE 2020 | ACTUALIZADO: 17 SEPTIEMBRE 2020 18:43

Los números de la radiotelevisión pública británica ya eran complicados antes de lo peor de la pandemia. El informe anual de BBC, que abarca gestión y resultados desde el 1 de abril de 2019 hasta el 31 de marzo de 2020, apunta un déficit de 119 millones de libras, lo que supone incrementar en un 72% las pérdidas respecto al periodo anterior. La corporación lo justifica indicando que recaudó un 5% menos por el canon, debido a que el Gobierno no quiere financiárselo a los mayores de 75 años.

Ese balance implica una mala situación de partida para un escenario que empeoró radicalmente más allá del periodo auditado. Reino Unido decretó el confinamiento de su población a partir del 23 de marzo ante la escalada de casos de coronavirus, de modo que el informe apenas recoge sus consecuencias en términos económicos.

Sí las refleja parcialmente en cuanto a pautas de consumo, ya que la radiotelevisión pública británica aumentó su alcance al 94% de la población adulta del país debido a las circunstancias sanitarias y el encierro. BBC fue considerada en los primeros compases de la pandemia como la fuente informativa más fiable sobre la pandemia por el 48% de los encuestados por Ipsos MORI, muy por delante de Sky News, señalada por un 8%.

La corporación llegó al COVID-19 embarcada en un plan de ahorro de costes que no solo no ha podido implementarse a lo largo de estos meses, sino que además no venía apuntalado por los datos del periodo previo. Hasta el 31 de marzo BBC tenía 19.572 empleados, frente a los 19.231 del año anterior, y su conjunto de directivos había aumentado de 250 a 253.

Tim Davie, el nuevo director general, recordó en la presentación de estas cifras que BBC tiene que hacer frente a un ajuste adicional de 125 millones de libras a causa de la pandemia, que se suma a los ahorros ya previstos, que han implicado 450 despidos. Y todo ello en un escenario más complicado que nunca, en el que se mezclan las incertidumbres económicas con la mala relación de la corporación con el Gobierno de Boris Johnson, así como el clima interno derivado de la brecha salarial entre géneros o el refuerzo inminente de la normativa interna sobre las opiniones de sus profesionales en redes sociales.