El escándalo de corrupción de la FIFA destapado en 2015 sigue estando presente en el día a día del grupo Imagina, dueño de Mediapro y accionista de Atresmedia. Sin ir más lejos, uno de los testigos interrogados en el juicio de la semana pasada acusó a la compañía controlada por Jaume Roures, Fox Sports y Grupo Televisa, de haber sobornado al organismo rector del fútbol para obtener los derechos de transmisión de partidos.
Alejandro Burzaco, ex presidente de la empresa argentina Torneos y Competencias (TyC), aseguró ante el fiscal que todas estas empresas de medios habían recurrido al soborno de forma «habitual» a cambio de contratos televisivos.
Una acusación que vuelve a poner en el punto de mira a Media World, filial de Imagina, dos años después de la inculpación de sus dos exdirectivos. Y es que en 2015 el departamento de Justicia de Estados Unidos declaró culpable a Roger Huguet, consejero delegado de la empresa, y Fabio Tordin, ejecutivo de la misma, por fraude electrónico y blanqueo de capitales. Tras la sentencia ambos fueron fulminados de manera inmediata e Imagina volcó en ellos toda la responsabilidad sobre «los individuos acusados».
Imagina registró en 2016 una provisión por importe de 10 millones de euros respecto a este tema con vistas a poder llegar a un acuerdo definitivo
Pero, frente al testimonio de Burzaco, Imagina afirma haber colaborado mano a mano con la fiscalía estadounidense en relación a la investigación iniciada a raíz del escándalo. «El grupo, desde la fecha anterior, está manteniendo una estrecha colaboración con la investigación del EDNY», sostiene la compañía en su último informe de cuentas, correspondiente al 2016.
Según dicho documento, las pesquisas se han llevado a cabo por parte de un comité independiente, formado por consejeros no ejecutivos de la compañía y profesionales independientes. En un principio, consisten en la realización de un análisis detallado de los episodios relacionados con el escándalo de corrupción y en una cuantificación del mismo.
Para dejar de estar bajo de la lupa de la justicia estadounidense, el grupo de Mediapro expone además haber avanzado bastante en la implementación de medidas para el refuerzo del control interno durante el año pasado. «A fin de evitar que hechos similares puedan suceder en cualquier filial de Imagina», se remacha para depurar más responsabilidades en este caso, por el que «a día de hoy no se han presentado cargos ni contra el grupo ni contra ninguna de sus filiales» -incluyendo las situadas en Estados Unidos- recuerda.
Con todo, la compañía audiovisual consideró conveniente registrar una provisión por importe de 10 millones de euros respecto a esta contingencia. Lo hizo «por prudencia», siguiendo la recomendación del denominado Comité Independiente, que planteó tener un mayor margen para poder llegar a un acuerdo definitivo en este tema.
Beneficio de 114 millones de euros
Tras lograr registrar en 2015 un beneficio récord de 137 millones de euros, Imagina Media Audiovisual experimentó un recorte del 17% en sus ganancias el año pasado. En concreto, logró un beneficio consolidado de 114 millones de euros.
En este periodo, la cifra de negocio creció un 2%, hasta los 1.498,7 millones de euros, frente a los 1.479,5 millones del año anterior. Dos tercios de esta cifra (1.000 millones) es lo que ha acordado pagar el fondo de inversión chino Orient Hontai Capital por adquirir el 54% del grupo, lo que supone diez veces el EBITDA alcanzado en 2016, que fue de 162 millones de euros.
Está previsto que esta operación, confirmada por Roures hace unas semanas en una entrevista concedida a Reuters, se cierre en el primer trimestre del 2018.
