Antonio Asensio, presidente del Grupo Zeta.

El Grupo Zeta registra unas pérdidas de 20M€ a la espera de culminar su venta

| 11 DICIEMBRE 2018 | ACTUALIZADO: 12 DICIEMBRE 2018 8:54

Pese a que ya debería haberse culminado, es ahora cuando el proceso de venta del Grupo Zeta entra en tiempo de descuento. Con el paso de los meses se han ido descolgando algunos de los principales interesados en hacerse con la editora de la familia Asensio. Hasta llegar al escenario actual, en el que de momento resisten dos posibles compradores: Prensa Ibérica, que tiene a tiro la operación tras la quita del 80% en la deuda que le ofrece Caixabank, y Henneo, que no renuncia a jugar su última mano.

Mientra se resuelve una operación que a ojos del sector hace tiempo que se prolongó más de la cuenta, y donde la última palabra la tiene la banca -acreedora de 100 millones de deuda-, el grupo Zeta ha sacado a relucir sus informes de cuentas referidos al último ejercicio económico. Según consta en la información depositada ante el Registro Mercantil, la compañía cerró el 2017 con unas pérdidas operativas de 20,6 millones de euros.

Estos números rojos están en claro contraste con los beneficios de 5,1 millones de euros que arrojó el año anterior. En su informe de gestión, el editor de El Periódico atribuye este vuelco en su resultado de explotación a la venta de Ediciones B a Penguin Random House por 40 millones en abril de 2017.

También le pasó factura el descenso del 8,5% registrado en su cifra de negocio, que pasó de 144,8 millones de euros a 132,5 millones. La mayor caída se acusó en los ingresos derivados de la venta de ejemplares, que se redujo hasta los 54,7 millones de euros, es decir, casi 11% menos. Curiosamente la publicidad resistió bastante bien la atipicidad del 2017, lo que hizo que apenas cayera un 3,8% y apuntara 65,2 millones de euros.

La reestructuración dispara los gastos

La reestructuración llevada a cabo en la plantilla de Zeta durante el año pasado hizo disparar los costes de personal hasta los 68,2 millones de euros, frente a los 63,6 millones del 2016. Por el contrario, los gastos de explotación se recortaron en un millón de euros, hasta los 28 millones.

En sus conclusiones finales, el auditor de las cuentas subraya que en la memoria consolidada adjunta por la compañía gestionada por Antonio Asensio no se desglosa la información relativa a la remuneración de los Administradores ni la retribución a la Alta Dirección, en contra de lo requerido por la normativa vigente. Como tampoco lo hicieron en 2016.