Reino Unido afronta la mayor huelga de periodistas en décadas

| 5 SEPTIEMBRE 2022 | ACTUALIZADO: 5 SEPTIEMBRE 2022 12:59

Cientos de trabajadores de Daily Mirror, Daily Express, Daily Star y docenas de periódicos locales pertenecientes al grupo Reach, el mayor editor de diarios del mercado británico, están llamados a la que será la huelga de mayor impacto en ese sector en décadas. La causa que vertebra la movilización es el auge disparatado del coste de vida y el rechazo de la compañía a negociar subidas salariales que permitan afrontar la situación a muchos de sus empleados, especialmente aquellos que trabajan en los periódicos más pequeños.

Según han contado a The Guardian hasta dos docenas de personas, Reach solo les ha ofrecido un incremento salarial del 3%. Esa cifra queda muy lejos del aumento de la inflación que está registrando Reino Unido, un 10,1% en julio. Esa es la mayor cifra en 40 años y el Banco de Inglaterra atribuye la tendencia fundamentalmente a las reverberaciones de la invasión de Ucrania por parte de Rusia, con efectos en los precios de gas, comida o petróleo. La situación ha obligado a ese organismo a elevar los tipos de interés hasta seis veces seguidas en los últimos tiempos y de momento están en un 1,75%, lo que a su vez afecta negativamente a algunos de quienes tienen una hipoteca con pagos más elevados.

El mayor grupo de periódicos del país no atiende las demandas de cientos de trabajadores que solicitan revisiones salariales que les permitan afrontar mejor el enorme repunte del coste de vida.

Para una parte significativa de los periodistas que trabajan en Reach las circunstancias actuales agravan condiciones económicas delicadas que vienen arrastrando desde hace años. La compañía ha venido incrementando el salario de muchos de ellos por debajo de la inflación anual y en los primeros compases de la pandemia lo rebajó en un 10% de manera generalizada, para más tarde devolverlo ante la amenaza de una acción legal por parte de la plantilla.

En ese mismo contexto se produjo el despido de 550 personas, un 12% del total de trabajadores, y se acentuó un sistema de trabajo que causa insatisfacción en parte de la plantilla. Muchos periodistas protestan porque se les obliga a fabricar tráfico de cualquier manera y en varios casos ni siquiera tienen ya una redacción a la que acudir, ya que Reach cerró algunas de ellas para ahorrar costes.

La compañía justifica la negativa a incrementar más los sueldos en relación con la viabilidad del negocio, cuyo arranque data de 1903. Reach ha vivido diferentes etapas a lo largo de esos casi 120 años y su última reencarnación supuso el cambio de denominación de Trinity Mirror a la actual, tras la compra de los activos de Northern & Shell.