Alphabet presenta el primer declive de ingresos de su historia por el coronavirus

| 1 AGOSTO 2020 | ACTUALIZADO: 4 AGOSTO 2020 9:03

El COVID-19 ha roto la racha histórica de crecimiento de la empresa matriz de Google. Por primera vez refleja en su balance una cifra negativa en comparación con los ingresos del año anterior, aunque sea un ligero -2% en un contexto en el que además consiguió mejorar la previsión de los analistas. El paso de los 38.944 millones del segundo trimestre de 2019 a los 38.297 del año en curso refleja la especial exposición de su negocio a publicidad de sectores muy perjudicados por la crisis del coronavirus.

Esto último queda explicitado en la caída de casi el 10% en la facturación registrada por los anuncios en búsquedas. Esos 2.300 millones de diferencia entre un año y otro solo han sido cubiertos en parte por YouTube, cuyo rendimiento publicitario sí mejoró ligeramente, hasta los 3.812 millones. Y el retroceso se sustancia también en parte en que la publicidad pasa de ser el 83% de los ingresos a un 78%, algo a lo que también contribuye el importante crecimiento de su negocio de alojamiento en la nube (3.010 millones frente a los 2.100 del año anterior) y el aumento de fondos procedentes de fuentes ajenas a los anuncios.

El área clave en el que la empresa matriz de Google se ha dejado gran parte del dinero que no ha facturado en anuncios es el de los viajes, que hace un uso intensivo de la publicidad en búsquedas. La pandemia lo ha bloqueado durante meses y ahora opera con muchas dificultades en distintas partes del mundo en la que sería una temporada alta regular. El presidente de Expedia, uno de los actores más importantes de esta industria en internet, contó en una entrevista en NBC que de los 5.000 millones habituales de inversión en anuncios de cada año no esperaba llegar ni a los 1.000 a lo largo de 2020. Y gran parte de ese gasto iba encaminado precisamente a búsquedas.

Alphabet es el único de los cuatro gigantes tecnológicos investigados por posibles prácticas anticompetencia por el Congreso de EEUU que ha registrado un descenso interanual de ingresos. Y paradójicamente es el más próximo a una posible regulación debido a su posición predominante en el mercado de la publicidad online o la preponderancia creciente que ofrece a sus propios productos en los resultados de las búsquedas.