Meta presenta el primer retroceso en ingresos de su historia mientras prepara a Facebook e Instagram para competir con TikTok

| 28 JULIO 2022 | ACTUALIZADO: 29 JULIO 2022 11:21

Tras más de 10 años en bolsa, Meta ha entregado por primera vez unos resultados en los que la facturación ha caído respecto al mismo periodo del año anterior. El hito se corresponde con el segundo trimestre, en el que ingresó 28.800 millones de dólares, casi un 1% menos que en 2021. El impacto de las difíciles circunstancias macroeconómicas en la publicidad explica esa evolución, que además coincide con el viraje de Facebook e Instagram hacia dinámicas semejantes a las de TikTok para competir en el mercado de los vídeos cortos y su inversión en el metaverso.

Ese escenario ha influido de manera decisiva en los beneficios, que han caído por tercer trimestre consecutivo hasta los 6.700 millones de dólares, en una secuencia para la que el precedente más próximo es el cuarto trimestre de 2012. Y la caída de la demanda por parte de los anunciantes se sustancia en una reducción del 14% en el precio medio por anuncio, algo que contrasta con el 47% de incremento que mostraba justo hace un año. Los recientes resultados de Twitter, Snap o Alphabet muestran tendencias similares.

La compañía se ha visto penalizada por la fortaleza del dólar, según Sheryl Sandberg, que estima que el 1% de caída interanual se hubiera convertido en un 3% de incremento en un escenario normal.

Otro factor clave es el de la fortaleza del dólar, que penaliza el negocio internacional por el tipo de cambio con monedas como el euro. De hecho la directora de Operaciones saliente Sheryl Sandberg indicó en la presentación que, excluido ese efecto, la compañía hubiera obtenido un incremento de ingresos del 3% y no una caída del 1%.

Para hacer frente a esta situación Meta ha decretado la reducción de contrataciones para los próximos meses, al igual que otras compañías de su sector. Y eso es lo que reduce en gran parte sus expectativas de costes para 2022, desde los 87.000-92.000 millones de dólares que tenía previstos hace algunos meses a los 85.000-88.000 con los que cuenta ahora. El consejero delegado Mark Zuckerberg ya explicó directamente a sus empleados que va a redoblar la presión sobre ellos y espera que como consecuencia algunos se marchen o sean despedidosEl objetivo es “hacer más con menos recursos”, según sus propias palabras.

Y lo que esa plantilla tiene por delante es precisamente un cambio sustancial de Facebook e Instagram para convertirlos en algo más cercano a TikTok, como ya anunció Zuckerberg en abril. Eso significa que la red social más importante del mundo se aleja progresivamente de su distintiva capa de interconexión de personas para avanzar hacia un modelo de descubrimiento de contenidos en el que los usuarios cada vez verán más publicaciones que no pertenecen a nadie a quien sigan. Eso ya se percibe en el hecho de que el 15% de lo que ve cualquiera de ellos ya es ajeno a su círculo de contactos y se le muestra mediante inteligencia artificial. Esa cifra aumentará a alrededor del 30% a finales del año que viene.

Eso ha molestado especialmente a algunos usuarios de Instagram, que piden poder ver de nuevo lo que hacen sus allegados y también quieren volver a ver más fotos que vídeos. La revuelta se vertebra a través de una petición en Change.org e incluye a figuras muy populares como Kim Kardashian y Kylie Jenner. Por ello Adam Mosseri, responsable de la aplicación, ha tenido que salir al paso para explicar que la plataforma evoluciona inexorablemente hacia el vídeo corto porque los datos internos les demuestran que los usuarios lo aceptan de buen grado. Pero eso a su vez compromete la viabilidad de influencers que basan su negocio en hacerse fotos con productos.