Disney+ encadena dos trimestres seguidos con reducción de suscriptores pero incrementa lo que generan
La base de clientes de Disney+ se ha reducido en 6,4 millones en dos trimestres, hasta los 157,8 millones a finales de marzo. Pero esa tendencia coincide con un aumento notable del ingreso medio por usuario (ARPU) en los mercados más rentables gracias a las últimas subidas de precios y la introducción de la versión con publicidad: lo que aporta el suscriptor de EEUU-Canadá ha mejorado un 20% y la contribución de los del resto del mundo se ha incrementado en un 6%. En ese segmento no se incluye Disney+ Hotstar, solo disponible en algunos países como India, cuyas suscripciones van a la baja después de la pérdida de los derechos de la liga de cricket de ese país y cuyo ARPU se ha desplomado un 20%.
El gigante del entretenimiento ha perdido 6,4 millones de clientes en su principal plataforma de vídeo bajo demanda en seis meses pero está monetizando mejor a los restantes.
El dato del mercado doméstico, el más importante en términos de negocio, es especialmente relevante porque el encarecimiento de la versión sin anuncios en hasta un 38% habría tenido un impacto limitado en cuanto a bajas. En los tres meses de referencia esa cifra ha caído un 1%, lo que se traduce en 300.000 usuarios menos que dejan el número total en 46,3 millones. En general la plataforma está acusando la situación macroeconómica por la que muchos hogares se replantean sus suscripciones y también está ofreciendo señales de cierta saturación en algunas zonas.
En todo caso, esta progresiva regeneración hacia mayores ingresos por cliente ayuda a explicar que Disney haya recortado de forma notable los números rojos asociados al streaming, que en gran parte vienen provocados por su principal plataforma. Los 659 millones de dólares perdidos en el arranque del año suponen una caída del 26% respecto a los 841 millones consignados en 2022, parcialmente gracias a un aumento del 12% en la división hasta los 5.510 millones.
La otra palanca clave es la de los ajustes que está ejecutando Disney en toda su organización, que incluye el despido de 7.000 personas, el abandono de proyectos como el metaverso y la reducción de inversión en contenido no deportivo en hasta 3.000 millones de dólares. La compañía está en inmersa en una reestructuración para sanear su situación financiera, que en el primer trimestre mejoró gracias al aumento de un 13% en la facturación total hasta los 21.800 millones y casi triplicó el beneficio para alcanzar los 1.271 millones.
