Ignacio Polanco, presidente ejecutivo de Timón y de la Fundación Santillana.

Los Polanco vislumbran la luz al final del túnel en su sicav

| 31 OCTUBRE 2017

Los herederos de Jesús de Polanco han sufrido en su propio patrimonio las dificultades financieras por las que ha ido atravesando el grupo Prisa en la última década. El progresivo deterioro en el valor de las participaciones de la dueña de El País y la cadena Ser han provocado pérdidas millonarias en la familia del editor fundador, si bien es cierto que el desgaste se ha ido minimizando con los años, a medida que el porcentaje de control sobre el capital de la compañía disminuía.

Los problemas llegan hasta Rucandio Inversiones Sicav, sociedad a través de la cual vehícula su participación como segundo accionista de Prisa, amén de las inversiones colectivas. Aquí las correcciones del valor de la acción provocaron un deterioro de 3,7 millones de euros en 2016, y se sitúan por encima de los 12 millones en los últimos cuatro años en el conjunto de Timón S.A., otra de las sociedades patrimoniales de la familia.

No en vano, al margen de la evolución que siguió la editora de El País el año pasado, los Polanco comenzaron a vislumbrar la luz al final del túnel a través de su sicav, que al cierre de 2015 presentaba unos fondos propios negativos de 117,79 millones de euros y su deuda con los bancos llegaba a 688,66 millones.

Según sus cuentas públicas, Rucandio cerró el 2016 con un resultado consolidado de 94,4 millones de euros, que fue más de diez veces superior al beneficio de 7,8 millones registrado el año anterior.

Esta mejora excepcional se extrae de las ventas, por un lado, del Hotel Jardín Tropical de Tenerife a HI Partners, la cadena hotelera del banco Sabadell, y del Grupo Garnica Plywood por otro. Cada operación reportó unos importes de 74,3 millones y 63,9 millones, respectivamente, lo que hace un total de 138,4 millones de euros.

Según el informe de gestión adjunto a las cuentas, los Polanco utilizaron esta cantidad para cancelar algunos de los préstamos sindicados que mantenía la empresa Timón con el banco Sabadell. Como ya informó este diario en su momento, esta operación había permitido reforzar el patrimonio del grupo y mejorar su debilitada situación financiera.

Por otro lado, abrió una nueva línea de crédito por valor de 75 millones de euros en Tropical Turística Canaria, sociedad a través de la cual controlan The Ritz Carlton Abama, un establecimiento de cinco estrellas ubicado en Tenerife

En consecuencia, la deuda financiera de Rucandio pasó de los 622,6 millones de euros de 2015 a situarse en los 366,6 millones al cierre del 2016, lo que equivale a una disminución del 41%. Asimismo, la deuda con los bancos se situó en los 408,2 millones de euros, 280 menos que el año anterior, de los que 22,4 corresponden a largo plazo y 385,7 a corto.