Warner Bros Discovery se adelanta a Disney y logra beneficios en su división de streaming por primera vez
La profunda reestructuración de Warner Bros Discovery (WBD) puede dar resultados antes de lo previsto, al menos en la división de streaming. Las cuentas del primer trimestre del año reflejan el hito de sus primeros beneficios operativos, de hasta 50 millones de dólares, tras una secuencia de pérdidas abultadas en años previos. Y de hecho, ahora la compañía espera que ese negocio llegue a ser rentable en EEUU a lo largo de 2023, un año antes de lo esperado. Solo 12 meses antes el vídeo bajo demanda había causado números rojos de 654 millones de dólares y en el periodo previo habían alcanzado los 217 millones.
Eso convierte a WBD en el primer gigante de Hollywood en escapar de las pérdidas en un segmento que hasta la fecha ha resultado muy intensivo en inversión y en el que de momento solo Netflix gana realmente dinero. La compañía está trabajando en el relanzamiento de su oferta de streaming a través de una plataforma bautizada como Max, que reúne contenido ahora disponible en HBO Max y el catálogo de Discovery. La perspectiva interna es que la programación de calidad de la primera será un motor de atracción de suscriptores y la amplia variedad de espacios de telerrealidad de la segunda operará bien para retenerlos.
Eso es algo que podrá empezar a comprobarse a partir de su estreno en EEUU el 23 de mayo, con un calendario de expansión internacional progresivo. En algunos mercados, WBD no lanzará Max en primera instancia y en su lugar licenciará contenidos a otras plataformas presentes, como es el caso de India. Y al final de esos contratos evaluará si existe la oportunidad de competir en esos países con visos de obtener rentabilidad de la apuesta. De hecho el gigante de los contenidos prevé que costará más tiempo equilibrar números vinculados al vídeo bajo demanda fuera de EEUU, entre otras cosas por los costes de lanzamiento de la nueva marca y la madurez irregular de algunos de esos mercados para ese soporte.
El streaming aportó 2.460 millones de dólares sobre el total de 10.700 que consigna WBD para el periodo de referencia. Eso supone un 1% menos que el año anterior, si bien la noticia positiva es que los ingresos vinculados a publicidad en ese negocio aumentaron un 29% gracias a las versiones con anuncios de sus plataformas. Pero una de las claves de la entrada en EBITDA positivo es la drástica reducción de costes, ya que de un año para otro cayeron un 24% debido a menor amortización de contenidos, el cierre de CNN+ y un gasto “más eficiente” en marketing. A cierre del primer trimestre, WBD tenía 97,6 millones de suscriptores.
El gigante del entretenimiento prevé ahora que el negocio del vídeo bajo demanda pase a ser rentable en EEUU a lo largo de 2023, un año antes de lo previsto.
La proyección positiva del negocio del streaming es crucial para una compañía que acumuló 1.069 millones de dólares en pérdidas netas provocadas por la “amortización antes de impuestos de intangibles relacionados con la adquisición”. El consejero delegado David Zaslav ha acometido ajustes a gran escala en la compañía creada en abril de 2022 para mejorar sus finanzas sobre la base del aumento de flujo de caja libre, la reducción de deuda y la consecución de rentabilidad en el vídeo bajo demanda.
