Facebook pasa a llamarse Meta
La empresa anteriormente conocida como Facebook es ahora Meta. Mark Zuckerberg ha anunciado el nuevo nombre de la compañía que fundó en 2004 en el evento Connect, en el que ha presentado novedades sobre su apuesta por realidad aumentada y realidad virtual. Ese ámbito es el que precisamente justifica el cambio de denominación, ya que Meta representa prácticamente una refundación de Facebook más allá de las redes sociales, con el metaverso como protagonista.
Ese nuevo escenario inmersivo es el que Zuckerberg plantea como la próxima gran plataforma de comunicación y experiencia, tras los teléfonos móviles. En un escrito explicativo sobre esta nueva etapa indica que “la cualidad definitoria del metaverso será la sensación de presencia, como si estuvieras justo ahí con otra persona en otro sitio”. En teoría, sobre esa percepción proporcionada por la realidad virtual los usuarios podrán hacer prácticamente todo lo que puedan imaginar sobre actividades corrientes como comprar, jugar, crear, trabajar o relacionarse otras personas.
El sistema creará oportunidades en esos y otros ámbitos más allá de la ubicación real, a través del uso de hologramas en diferentes dispositivos: con gafas de realidad aumentada, una tecnología que se ha ido haciendo habitual en espacios televisivos en los últimos tiempos, se podrá potenciar la experiencia física; los dispositivos de Oculus servirán para entrar por completo en la realidad virtual; y los ordenadores y teléfonos móviles servirán de puerta de entrada al metaverso a través de las diferentes aplicaciones de Meta. Todo ello bajo la perspectiva de que en la próxima década 1.000 millones de personas estarán ya utilizando este nuevo entorno.
La compañía fundada por Mark Zuckerberg en 2004 da por finalizada la etapa en la que solo era conocida por sus aplicaciones sociales y cambia de denominación para abrazar el metaverso.
Este anuncio llega en un momento controvertido para la empresa anteriormente conocida como Facebook, ya que se están publicando docenas de artículos en base a documentación interna filtrada que no deja en buen lugar a la empresa en distintos frentes. Entre ellos, el efecto negativo de sus dinámicas sobre sus usuarios más jóvenes en el contexto de su desinterés creciente por utilizar la aplicación principal de la compañía, así como el viraje previsto para atraerlos de nuevo en los próximos años.
Según lo explicado en la reciente presentación de resultados, el nuevo perímetro del gigante tecnológico se sustanciará en dos nuevos segmentos contables: por un lado, las aplicaciones tradicionales por las que hasta ahora se conocía a Facebook, bajo la denominación Family of Apps (FoA); por el otro, lo imputable a contenidos, dispositivos y software en relación con realidad aumentada y realidad virtual, en el epígrafe Facebook Reality Labs (FRL).
De esta forma se podrá ver la evolución de la nueva apuesta prioritaria de la compañía, que tiene previsto terminar el año con una inversión ejecutada en el metaverso de unos 10.000 millones de dólares. Los abultados ingresos del negocio tradicional tendrán que sostener años de desarrollo y venta a bajo precio de esa tecnología para promover su penetración.
