Spotify

Spotify arrancó el año con la mayor rentabilidad de su historia tras reducir “demasiado” su gasto en marketing

| 24 ABRIL 2024 | ACTUALIZADO: 25 ABRIL 2024 9:21

Los resultados del primer trimestre de 2024 definen la entrada de Spotify en una “nueva fase”, en palabras de su consejero delegado Daniel Ek.

La compañía convirtió las pérdidas de 225 millones de euros del año anterior en los mayores beneficios de su historia como cotizada, 197 millones, en parte como consecuencia de un plan de ajuste de costes que ha conllevado “una actividad de marketing moderada”.

A ese recorte atribuye en concreto haber finalizado el periodo con tres millones menos de nuevos usuarios mensuales respecto a su propia previsión, hasta 615 millones que suponen en todo caso un incremento del 19%.

El propio Ek reconoció en la presentación de las cifras que “en retrospectiva, probablemente ajustamos demasiado” y apuntó que ese movimiento está en proceso de corrección.

Lo que sí fue en línea con lo anticipado fue el segmento de usuarios premium, que se situó en 239 millones al final del periodo, un 14% más que a su vez impulsó en un 20% los ingresos derivados de las suscripciones para totalizar 3.247 millones de euros sobre los 3.636 de facturación total. El resto vino de la mano de la publicidad, que creció en un 18% para fijar la cifra en 389 millones y se mantiene en el entorno del 11% del negocio.

Sin embargo, las iniciativas puestas en marcha en el trimestre de referencia anticipan que esa estructura dual pronto pasará a ser más compleja. Spotify lanzó un nuevo acceso a audiolibros en EEUU para los usuarios que vienen consumiendo contenido con anuncios y también presentó su proyecto AUX, una agencia interna de consultoría cuyo objetivo es conectar a marcas con música que pueda resultarles útil para sus campañas.

Los costes operativos de la compañía se redujeron en un 9% en plena reorientación de su estrategia a disciplina en el gasto y nuevas vías de ingresos.

A falta de ver el desarrollo de esas y otras tentativas con las que la plataforma intenta abrir vías de negocio, como la inclusión de vídeos musicales en 11 mercados, el compromiso adquirido por Ek con sus inversores se basa en potenciar la disciplina de costes al máximo. Y eso se tradujo en ese periodo en un descenso del 9% en los gastos de funcionamiento de Spotify, en los que computa la drástica reducción de plantilla y la reorientación de su negocio de podcast.

Además, sus subidas de precios en docenas de mercados del año pasado, incluida la primera en EEUU, pusieron las bases para una mejora progresiva del ingreso medio por usuario premium, que se elevó en un 5%.