Las suscripciones acolcharon el primer impacto del coronavirus sobre los ingresos de los medios británicos

| 29 AGOSTO 2020

El incremento de más de un 19% en los ingresos obtenidos a partir de suscriptores compensó en parte el desplome de la facturación publicitaria para los editores británicos durante el primer trimestre. Ese es el resultado de la encuesta a 21 miembros de AOP, asociación que agrupa a medios digitales, que arroja un balance negativo promedio del 2,3% en comparación con todo lo ingresado en el mismo periodo de 2019.

El rango temporal de esa encuesta solo recoge las primeras semanas de la crisis generada por la pandemia, cuyo impacto empezó a ser realmente severo a partir de mediados de marzo. Pero apuntala la tendencia de aumento de lectores de pago que han registrado medios relevantes de todo el mundo, así como la del retroceso en ingresos publicitarios.

En concreto, los editores que han tomado parte en ella han indicado que las suscripciones ya conforman el 22% de lo que facturan, lo que supone 15 puntos más que hace 10 años. Y la misma comparación temporal deja una caída de 16 puntos en el peso de la publicidad display, que pasa del 58 al 42%.

Esta vía de ingresos retrocedió un 13% respecto al año anterior, lo que la convierte en la más afectada dentro del ramillete tradicional. La entrada de dinero a través de patrocinios y anuncios en vídeo cayó un 9 y un 7%, respectivamente. Y eso explica que el 89% de los editores encuestados planteara como prioritario conseguir ingresos ajenos a la publicidad, frente al 78% que lo consideraba así el año pasado.

Los resultados del estudio son esperanzadores para sus autores, ya que los primeros compases de la crisis del coronavirus fueron menos duros de lo que el sector preveía y el buen comportamiento de las suscripciones anticipaba un rendimiento aún mejor durante los meses más complicados que tendrían que llegar después. Pero también reflejan pesimismo entre quienes han respondido de cara al impacto prolongado del COVID-19 en la industria.

Editores participantes en esa encuesta han ido tomando distintas decisiones para adaptarse a la nueva situación: The Guardian va a prescindir de 180 personas, entre ellas parte de la redacción de deportes, pese a haber logrado 200.000 lectores de pago más hasta el mes de junio; The Telegraph devolvió el dinero público que había solicitado porque consiguió mantenerse rentable gracias a sus suscriptores y adelantó sus planes de dejar de publicar contenido patrocinado; y el Daily Mail despedirá a unas 100 personas pese al hito de haber desplazado a The Sun como periódico impreso más vendido de Reino Unido.