X cobrará 16 dólares al mes a usuarios que no quieran ver anuncios y deseen impulso extra para sus respuestas
Los dos planes suplementarios de suscripción de X que afloraron hace algunas semanas en el código de la aplicación y que fueron posteriormente confirmados por Elon Musk ya tienen precios. En concreto, el más caro costará 16 dólares al mes o 168 al año, se llamará Premium+ y habilitará para quien lo pague una experiencia totalmente libre de anuncios, además de impulsar la visibilidad de sus respuestas por encima de quienes no lo tengan contratado.
La otra adición ha recibido el nombre de Basic y por tres euros al mes no aligera la carga publicitaria a sus suscriptores, a quienes ofrece un empujón más discreto para que se vean más sus respuestas. De momento solo están disponibles en la web, donde el precio es el fijado por la compañía porque no tienen que agregar el sobrecoste de las comisiones de Apple y Google en dispositivos móviles con iOS o Android.
Ambos esquemas completan una gama que hasta la fecha solo contaba con una suscripción Premium estándar que ofrece una marca de verificación, capacidad de editar publicaciones o posibilidad de superar los límites tradicionales de texto o de tiempo de vídeos, entre otras cosas. Y también posibilita ganar dinero en la plataforma al compartir ingresos generados por anuncios entre las respuestas que generan sus intervenciones.
La antigua Twitter no ha hecho públicos hasta la fecha datos concretos sobre el número de usuarios que pagan por esas funcionalidades. Un análisis realizado por el investigador Travis Brown ha estimado recientemente que entre 950.000 y 1,2 millones de personas estarían pagando los ocho dólares correspondientes a esa primera suscripción lanzada por la plataforma. Incluso si esos números fueran ajustados a la realidad, la contribución de esa vía de ingresos seguiría siendo magra respecto al volumen que suponía la publicidad para la compañía antes de que Musk la comprara.
La compañía revela la nueva estructura de precios de sus tres planes de suscripción en base a la densidad publicitaria.
Las únicas cifras confirmadas por parte del magnate al respecto son las que apuntan un declive considerable en el negocio comercial de la red social, con un flujo negativo de caja en julio debido al desplome del 50% en esa facturación. Musk ha venido atribuyendo ese descenso significativo a la operativa de activistas y otros colectivos interesados en perjudicar a la empresa y de hecho ha presentado una demanda contra una organización que estudia la prevalencia de los discursos de odio en la plataforma por considerar que ese es su objetivo.
En todo caso, X estaría en puertas de la rentabilidad a principios del año que viene, según su consejera delegada, Linda Yaccarino. Ese hito llegaría gracias al retorno de casi todos los anunciantes que habían dejado de invertir, aunque la directiva reconoció ante la banca acreedora que lo están haciendo con menos dinero.
