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X podría dejar de ingresar hasta 75 millones de dólares por el boicot tras la polémica antisemita de Musk

| 28 NOVIEMBRE 2023 | ACTUALIZADO: 29 NOVIEMBRE 2023 8:57

La última controversia generada por Elon Musk ha colocado a la antigua Twitter en una posición delicada después de que grandes anunciantes como Apple, Disney o IBM hayan decidido dejar de invertir en publicidad. Y documentación interna de X a la que ha tenido acceso The New York Times cuantifica el posible lucro cesante en hasta 75 millones de dólares en las próximas semanas, lo que supondría un golpe importante a la planificación publicitaria justo en el trimestre de mayor compra de espacios.

En concreto los documentos referidos han sido elaborados por del departamento de ventas de la plataforma con el objetivo de seguir al detalle el cese de inversión de una lista creciente de más de 100 compañías. Y también incluyen a otras por docenas a las que se atribuye un riesgo variable de acabar deteniendo igualmente su planificación. Entre unas y otras suman hasta 75 millones de dólares si la situación no mejorara antes de que termine el año, aunque X reduce la cifra hasta 11 millones y refuta la información del diario neoyorkino indicando que ese dato o bien era antiguo o representaba un ejercicio interno de evaluación de riesgo total.

Más allá de esta disparidad, la documentación vista por The New York Times detalla más de cuatro millones de dólares en campañas comprometidas que ya no serán ejecutados por Microsoft, en torno a tres millones de dólares en el caso de Netflix o más de un millón de dólares en el de Airbnb. Todo ello a causa de que Musk diera validez en su plataforma a una teoría antisemita publicada por otro usuario, que además coincidió en el tiempo con una investigación previa de Media Matters que concluía que X estaba mostrando anuncios de grandes marcas al lado de contenido pronazi.

La plataforma refuta el dato reflejado en la documentación intenta vista por The New York Times y reduce a 11 millones la exposición en las últimas semanas del año.

El eventual impacto de este boicot podría frustrar las previsiones comunicadas por la consejera delegada Linda Yaccarino en torno a que la compañía entrara en rentabilidad a principios del año que viene. Esa proyección ya de por sí se sostenía sobre el retorno de anunciantes que invertían menos dinero como precaución ante los problemas de seguridad de marca que se han incrementado en la antigua Twitter desde que fuera adquirida por Musk, desde la difusión de discursos de odio hasta la desinformación. Esa coyuntura es la que ha hecho que la Comisión Europea haya decidido parar su planificación en esa red social.